La investigación contra Walmart de México, la cadena minorista más grande del país latinoamericano, inició a mediados de 2020 luego de una denuncia presentada por su competidor Chedraui y está relacionada con posibles prácticas monopólicas relativas en el mercado de abastecimiento y distribución mayorista de bienes de consumo, su comercialización minorista y los servicios relacionados.
“ Probablemente dentro de muy pocos días o semanas (la Cofece anunciará el veredicto definitivo)”, dijo el vicepresidente senior de Asuntos Corporativos de la empresa, Javier Treviño, en rueda de prensa.
Más tarde, Alberto Sepúlveda, vicepresidente senior de Legal y Prevención de la firma -conocida como Walmex-, estimó que la resolución se dará a conocer “antes del cierre” de octubre.
Walmex, el mayor empleador privado de México, defendió que siempre ha actuado “acorde a la ley” y sostiene que no tiene poder sustancial en el mercado.
La autoridad asegura que las pequeñas empresas se ven afectadas por las grandes cadenas que imponen duras condiciones, como retrasar los pagos o exigir a los vendedores asumir el riesgo de los productos no vendidos.
Sepúlveda dijo que la Cofece no le permitió a Walmart una “defensa adecuada” al testar gran parte de la investigación y calificó el proceso como una “persecución” del organismo contra la firma, presente también en Centroamérica.
De encontrarse culpable, Walmart podría ser sujeto de multas, restricciones de conducta e, incluso, la posibilidad de que terceros afectados presenten demandas por daños y perjuicios.
La decisión será seguida de cerca por observadores de la industria y podría tener implicaciones significativas para las operaciones de Walmex en el país.
Desde que se hizo pública la investigación, en octubre del año pasado, las acciones de Walmex han perdido valor y el martes cotizaban en 56.49 pesos, una reducción del 2.69 por ciento desde el cierre del lunes.
Ignacio Caride, presidente ejecutivo y director general de Walmex, dijo que una resolución desfavorable podría obligar a la empresa a ajustar sus operaciones, pero no afectaría las inversiones anunciadas.
“ Tendremos que adaptarnos para seguir operando”, sostuvo Caride. “Nos preocuparía que nos pongan ciertos límites que hagan que nuestros precios suban”, agregó.