Las dos empresas poseen líneas de producción en China. En octubre la comisión -el brazo ejecutivo de la Unión Europea- adoptó aranceles adicionales de hasta 35 por ciento a automóviles eléctricos producidos en China, además del 10 por ciento ya existente.
De esta forma, esas empresas se suman a los fabricantes chinos BYD, Geely y SAIC en el proceso contra los aranceles.
Esas medidas fueron tachadas de “proteccionista” por China, que elevó el caso a la Organización Mundial del Comercio (OMC).
La Unión Europea justificó la adopción de los aranceles adicionales afirmando que esos fabricantes se benefician de subsidios indebidos.
El bloque europeo adelantó que está dispuesto a cancelar estos aranceles adicionales en caso de que se alcance un acuerdo negociado con China para resolver la situación.
Los aranceles adicionales adoptados por la Unión Europea para el grupo automotor SAIC fueron fijados en 35.3 por ciento, al tiempo que el BYD tendría aranceles del 17 por ceinto y el Geely 18.8 por ciento.
Las empresas que cooperaron con las investigaciones de la Unión Europea relativas al impacto sobre la competencia en el bloque tendrán un arancel del 20.7 por ciento, y el resto de las firmas 35.3 por ciento.