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Coahuila

Síndrome de miositis tensional

Por Verónica Marroquín

Hace 4 meses

Para: Jorge Marroquín Narváez (por su cumpleaños)

ESTIMADOS LECTORES: con los mejores deseos de que se encuentren gozando de las bendiciones que Dios y la vida misma, así como nosotros por consecuencia de nuestros pensamientos y acciones, nos generamos.

El tema de hoy es muy importante, ya que un porcentaje muy elevado de personas padecemos este SÍNDROME DE MIOSITIS TENSIONAL en alguna etapa de nuestra vida, y realmente es terrible, ya que puede llegar a incapacitarte.

Este síndrome de miositis tensional es actualmente el trastorno físico de origen emocional más común en los Estados Unidos y probablemente en todo el mundo occidental.

También, y no menos importante, la PSICONEUROFISIOLOGÍA de los procesos psicogénicos; cómo las emociones estimulan al cerebro para que produzcan síntomas físicos.

En el año de 1904 los médicos habrían descrito una dolorosa patología muscular llamada FIBROMIALGIA MIOFFASCITIS, FIBROSIS O FIBROMIOSITIS, pero nadie había sido capaz de identificar la patología exacta o la causa de la dolencia.

Esta información la proporciona el Dr. John E. Sarno en su libro Curar el Cuerpo, Eliminar el Dolor, para quienes padecen de dolor crónico de espalda, hombros, glúteos y cuello.

El Dr. Sarno comenta que comenzó a tratar el dolor de espalda como si no se supiera nada sobre sus causas. Y que pronto se dio cuenta de que el músculo era el principal tejido comprometido en este proceso. Y comenta que algo le estaba ocurriendo a los músculos del cuello, hombros, espalda y glúteos.

El Dr. Sarno dice que, en los inicios de los setenta, él empezó a dudar de los diagnósticos convencionales y por lo tanto de los tratamientos sobre los síndromes de dolor de cuello, hombros y espalda. Los dolores de la nuca hasta los glúteos, eran los principales implicados. Los profesionales de la salud dieron nombre a esto como fibromialgia. Y el Dr. Sarno al estudiar la literatura médica y una creciente experiencia con sus pacientes lo llevaron a pensar que estas dolencias descritas anteriormente, formaban parte de una patología dolorosa que él llamo “El síndrome de miositis tensional (SMT)”. Miositis quiere decir alteración fisiológica de los músculos. El SMT es un doloroso pero inofensivo cambio en el estado de los músculos. Y después se preguntaba: ¿Qué sucedía con las señales neurológicas y los síntomas en las piernas y los brazos? Llegó a pensar que esto se debía a una compresión estructural en la columna o por esa misteriosa “INFLAMACIÓN” tan citada por otros profesionales, comenta el Dr. Sarno en su libro. Y al ver que el número de inconsistencias aumentaba, se vio obligado a concluir que el proceso que provocaba el dolor muscular también era el causante de los síntomas nerviosos. Y se preguntó después ¿cuál era ese proceso? Cuando los médicos hacen la historia clínica de sus pacientes, preguntan normalmente enfermedades o síntomas pasados o presentes, el Dr. Sarno comprobó que 88% de sus pacientes tenían un historial de enfermedades gastrointestinales menores tales como acidez, síntomas preulcerosos, hernia de hiato, colitis, colon espástico, síndrome de irritación intestinal y otras reacciones inducidas por la tensión como el dolor de cabeza, la migraña, el eccema y la micción frecuente. Aunque no todos los médicos están dispuestos a aceptar que estos problemas están relacionados con fenómenos emocionales y sicológicos. Comenta el mismo Dr. Sarno que padecía de dolores de cabeza, con las típicas visiones de “luces” que preceden el inicio del dolor. Alguien le sugirió que la base de estos dolores podría ser rabia contenida. Y la siguiente vez que vio “luces” se sentó y trato de pensar cuál era esa rabia que estaba reprimiendo. No lo consiguió encontrar la respuesta, pero dice que por primera vez en su vida el dolor de cabeza no se manifestó. Comenta que esta experiencia es la prueba de que su dolor de cabeza era causado por fenómenos emocionales. Y esto lo llevó a pensar que los dolores de espalda también pudieran formar parte del mismo grupo de trastornos de origen emocional. Y Cuando puso a prueba esta hipótesis les dijo a sus pacientes que creía que su dolor se debía a la “TENSIÓN” y comenta que se sorprendió al comprobar que aquellos pacientes que aceptaban el diagnóstico mejoraban. (Y yo como terapeuta, cuando hago mi hipótesis del posible problema del paciente, que es diferente al que él piensa, y se lo digo de otra manera, se le llama redefinición, y si el paciente lo acepta, su proceso de sanación empieza y llega a sanar, y los que no, suelen dejar la terapia, ya que cuando no se acepta no hay cambio, y a quien no quiere cambiar pues no lo puedes obligar. Hay que esperar a que vuelva la crisis y acepte que requiere cambio y ayuda profesional). Asimismo comenta el Dr. Sarno, que aquellos que rechazaban su hipótesis seguían igual. También los pacientes del Dr. en aquellos años, comenta que acudían a sesiones de fisioterapia, y el Dr. le pedía al fisioterapeuta que le dijera al paciente que el objetivo de la terapia era solamente proporcionarle alivio provisional de los síntomas, y que la verdadera recuperación dependía de que se reconociera la naturaleza del proceso. Y aquellos que mejoraron estuvieron de acuerdo con el diagnóstico. El reconocimiento de una causa emocional en la génesis de los síntomas servía de alguna manera para eliminar esos síntomas. Menciona que algunas de las características de los pacientes que padecían este síndrome, ya que los síntomas eran una expresión física de la ansiedad y que los individuos perfeccionistas, meticulosos, responsables, compulsivos y muy trabajadores eran proclives al (SMT).

Yo como terapeuta psicoemocional, y como paciente, estoy de acuerdo con su teoría de que la mayoría de las enfermedades (NO TODAS) y dolores físicos, son en ocasiones por motivos de emociones y traumas no sanados, (en ocasiones los pacientes ni saben que las tienen) y algo muy IMPORTANTE que quiero decirles, que “si sufrimos de un dolor cualquiera que sea debemos de acudir siempre en primera instancia a un doctor y después de estudios determinará la causa probable del origen del dolor, y sí, se recomienda siempre acudir con un terapeuta emocional, ya que ayudará por mucho a su proceso de sanación, pues a veces el diagnóstico es una enfermedad grave que puede venir por una condición congénita y/o degenerativa, terminal, que eso puede llevar a depresión y ansiedad, desde leves hasta crónicas. Siempre es recomendable acudir con profesionales de la salud fisiológica, emocional y mental. Un tratamiento interdisciplinario ayudará muchísimo. Reciban un abrazo. Su amiga y terapeuta Verónica, Diosito por delante.

 

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