Saltillo, Coah.- Salió de la Región Carbonífera de Coahuila con una beca y se convirtió en un empresario exitoso y senador de la República. Armando Guadiana Tijerina hizo realidad su sueño de servir a su estado, superando la pobreza, convirtiéndose dos veces en candidato a la Gubernatura, líder de la oposición e inspiración para miles de coahuilenses. 

Con el fallecimiento de Santana Armando Guadiana Tijerina, como fue bautizado en su natal Múzquiz en 1946, un grupo político se queda sin patriarca y se genera un vacío de liderazgo difícil de llenar. Un lugar en la historia del estado que se comenzó a gestar en la Región Carbonífera de Coahuila.

Durante diversas entrevistas, Guadiana, a mediados de los “2000”, siendo ya empresario minero, dio a conocer que era más que un simple sombrerudo y bigotón, apacible aunque aguerrido, dicharachero y bonachón.

Fue en ese entonces que las nuevas generaciones se enteraron de que los orígenes de su familia están en la región de Guadiana, en España, cuyos antepasados llegaron hasta Coahuila donde se asentaron. Ahí, su padre, un trabajador minero, vio en Armando algo especial, así que gestionó y logró que el Sindicato Minero le otorgara una beca.

Así fue como Santana Guadiana salió de Múzquiz para estudiar en el Tecnológico de Monterrey, en la capital de Nuevo León, donde con esfuerzo y dedicación se graduó como ingeniero civil. Pero él quiso más. También estudió una maestría en Ciencias con especialidad en Investigación.

Su capacidad con los números y la facilidad para explicarlos hicieron que se convirtiera en maestro del Tec en diversas materias, en una de las cuales fue maestro de Luis Donaldo Colosio Murrieta, con quien conservó amistad hasta la época en que su expupilo se volvió candidato a la Presidencia de la República, a quien todavía pudo ver un mes antes de ser asesinado.

El retorno

Regresó a Coahuila con intereses emprendedores fundando en Saltillo varias empresas, entre ellas las primeras de computadoras y servicio al cliente, lo cual fue el inicio de una serie de negocios en los que cimentó su fortuna.

Es en aquella época en la que incursiona también en la política, siendo llamado por el entonces gobernador Eulalio Gutiérrez Treviño para ser nombrado director general de Catastro en el estado, cargo que ocupó de 1971 a 1973, cuando renunció para lanzarse como candidato a diputado local. Gana esa elección y asume como representante del distrito 10 de 1973 a 1976.

A partir de ese entonces, Guadiana Tijerina se aleja varias décadas de la política local para concentrarse en sus negocios personales, pero ahora orientados a la minería, logrando varias concesiones para la extracción y venta de carbón en la región en la que nació.

Su éxito como empresario minero lo llevó a catapultar su estatus como uno de los más prósperos, con negocios no sólo en Coahuila, sino en Zacatecas y otros estados de la República, formando parte de la Asociación de Ingenieros de Minas, Metalurgistas y Geólogos de México, A.C., y​ consejero de la Cámara Minera de México.

Durante esa época fue presidente del Club de Beisbol Saraperos de Saltillo por casi una década, también se convirtió en empresario y promotor taurino, siendo uno de los más férreos opositores a la prohibición de las corridas de toros en Coahuila.

Regresó a la política después del año 2005, apadrinando asociaciones civiles para protestar en contra la Administración del entonces gobernador Humberto Moreira Valdés, motivo por el que acaricia por primera vez la posibilidad de ser candidato a la Gubernatura por la vía independiente. 

Es durante el 2012 cuando renuncia a su filiación priista y se une al recién fundado partido Morena. Su popularidad viajando por Coahuila y el resto de la República hace que sea el candidato natural a la Gubernatura de Coahuila en el 2017, compitiendo contra el priista Miguel Ángel Riquelme Solís. 

No gana la elección, pero posiciona a Morena en el tercer lugar de la política local, desbancando a partidos con larga trayectoria y encabeza el movimiento Coahuila Digno, junto con figuras como Guillermo Anaya, Evaristo Lenin Pérez, Javier Guerrero y José Ángel Pérez, deslegitimando el triunfo del ganador de la elección, a quien impugnaron ante tribunales electorales.

Con ello, se encumbra como nuevo líder de la oposición en el estado y mecenas de un grupo de políticos a quienes impulsó, ocupando cargos públicos y candidaturas. Por eso, durante la campaña presidencial del 2018, el entonces candidato Andrés Manuel López Obrador, se vale de su popularidad para hacer campaña en Coahuila, otorgándole la candidatura al Senado.

Ese año, Guadiana obtiene 510 mil votos y gana la elección. Es nombrado senador por Coahuila y presidente de la Comisión de Energía. Durante los casi cinco años en el cargo, pidió licencia en tres ocasiones. La primera en el 2021 para ser candidato a la Alcaldía de Saltillo, terminando en el segundo lugar. Tras la elección regresa a la Cámara de Senadores.

Armando Guadiana, el morenista que ‘soñaba’ con gobernar Coahuila

La segunda vez que solicita licencia fue a finales del 2022, luego de una ríspida elección interna para seleccionar al candidato a la gubernatura, pues ya para ese momento existían otros liderazgos de su partido intentando desbancarlo.

El arrastre que todavía tenía entre los coahuilenses de la izquierda, le dio el triunfo en la encuesta interna, y tras ser nombrado candidato a la Gubernatura por Morena, por segunda ocasión, fue atacado e insultado por el exfuncionario federal morenista y candidato a la Gubernatura por el PT, Ricardo Sóstenes Mejía Berdeja, durante toda la campaña.

En esta elección del 2023 vuelve a quedar en segundo lugar, aunque el impulso de su figura en el partido, provoca que, en la elección para renovar el Congreso local, cinco morenistas ocuparan escaños plurinominales, entre ellos Alberto Hurtado, el más cercano de sus colaboradores.

Tras concluir el proceso regresa al Senado durante algunas semanas. Posteriormente, su disminuida salud lo obligan a salir del país para tratar el cáncer de próstata que padecía desde el 2017.

Para finales de octubre de este mismo año, solicitó licencia por tercera ocasión, anunciando que permanecería en Houston, Texas, para continuar con el tratamiento médico en un hospital norteamericano y con especialistas de otras partes del mundo.

Desde allá impulsó y apoyó la carrera política de su hija Cecilia Guadiana, quien, tras obtener el primer lugar entre las mujeres mejor calificadas en la encuesta de Morena, ocupará el segundo lugar de la fórmula de la candidatura de Morena al Senado, en la elección del 2024.  

Con la intención de pasar las fiestas decembrinas con su familia, el senador Armando Guadiana se trasladó a México en las últimas semanas, sin embargo, una recaía lo llevó nuevamente a un hospital de Monterrey, donde falleció la madrugada del 26 de diciembre.