Piedras Negras.- Autoridades de Texas comenzaron este fin de semana con la ampliación del muro flotante fronterizo que se encuentra sobre el río Bravo para frenar el posible cruce de miles de migrantes que serán deportados a partir de la próxima semana que Donald Trump asuma la presidencia de Estados Unidos.

Desde el pasado viernes se instalaron cuatro boyas más, adicionales a los 300 m que ya existían de estas bases flotantes, además se comenzó con los trabajos de acomodo de pilares de concreto que sostendrán otros 300 metros de boyas que se tienen proyectados instalar a partir de los próximos días.

Trabajadores de compañías que laboran en esta tarea se señalaron que actualmente sólo acomodan a la distancia en la orilla del río los pilares, cada uno de 1 tonelada de peso que sostienen tramos de las boyas a medio río y evitan que la corriente se las lleve.

Las boyas flotantes sumarán así 600 metros de longitud en un muro sobre la mitad del río en un paraje conocido como Las Adjuntas o La Nogalera del lado norteamericano y en donde las bandas de traficantes por años utilizaron para cruzar miles de migrantes indocumentados hacia Estados Unidos desde Piedras Negras.