Arte
Por Christian García
Publicado el sábado, 28 de septiembre del 2024 a las 04:04
Saltillo, Coah.- Cuando Suzette Celaya Aguilar recibió el Premio Amazon de Novela por su libro Nosotras en esta ciudad, definió a Zócalo que este libro era una reflexión de los daños que el progreso dejó en un pueblo.
Ese impacto se pliega en una serie de duelos que se sobreponen y se unen a lo largo de esta novela que por medio de una atmósfera opresiva en un paisaje de páramos abiertos constriñe a sus personajes, los deja sin aliento, hasta que sus voces son apenas “susurros… rumores”, como dice la escritora quien conversa nuevamente con Zócalo por la reedición de su libro gracias al sello Hachette Livre.
En Nosotras, Celaya Aguilar transporta al lector a 1967 en un pueblo que fue inundado por el agua. En este escenario hosco pero melancólico, duro pero nostálgico, vive Violeta el personaje principal del libro mediante el cual se conoce la historia del lugar, un pueblo que se construye por medio de esos rumores, fantasmas vocales que se pierden con el viento.
“
En el caso de Violeta quería que fuera un presencia física, que ella recorriera ese pueblo dañado, que viviera su duelo, pero que también observara los de los otros”, apunta y añade que “en cuanto a los rumores, esas son las voces del resto de las mujeres que viven en ese lugar y tienen sus propios duelos.
“
Al principio, cuando comencé a escribir esta novela quería que hubiera fantasmas reales, espíritus, pero al final eso llevaría al libro a un lugar donde no querría. Por eso los transformé en esos susurros, esos rumores”, explica a Zócalo la escritora que presentará mañana su libro en la Feria Internacional del Libro de Monterrey, que arranca hoy.
Esas mujeres son, también, las que comienzan a volverse más tangibles en contraposición al mundo fantasmagórico que habitan. Son esas voces las que se levantan y comienzan a llamar a sus pérdidas como lo que son, pero también sus luchas.
“
Esa verbalización de las pérdidas era lo que yo quería mostrar. Hay un silencio siempre que se pierde que no creo que esté bien. La novela también va sobre soltar, dejar ir esas cosas, a esos fantasmas”, comentó.
Pero a lo largo de Nosotras –el plural del título ya da un avance–, también importa el término de la comunidad, saber que hay otra persona que está cruzando por lo mismo, en este caso son mujeres “que desde las cuevas, por ejemplo, hablan, levantan la voz, ya no se quedan calladas en cuanto a sus pérdidas”, explicó.
Para lograr esa atmósfera pesada y densa, en la que el agua, la tierra y el vacío se llenarán de melancolía y cansancio, Celaya Aguilar investigó mucho y, sobre todo, leyó al escritor chihuahuense Jesús Gardea de quien tomó “la idea de esos espacios abiertos pero también opresivos llenos de silencios y de vientos”, dando pasó así a un mundo en el que la soledad empuja a que su personaje avance, se enfrente consigo misma pero que también se apoye en otras.
“
La novela ha tenido un gran impacto en la comunidad de lectoras, creo que con eso ya he triunfado”, finalizó.
Mañana:
Nosotras
Suzette Celaya Aguilar
16:00 horas
Feria Internacional del Libro de Monterrey
Más sobre esta sección Más en Arte
Hace 23 horas
Hace 1 dia
Hace 2 dias
Hace 2 dias
Hace 2 dias