Para el 2025, el fidencista Gerardo Ríos Casillas auguró un año difícil, sobre todo por una nueva pandemia que pondrá en jaque la vida de la población, aunado a lo que será una de las peores sequías que empeorará el panorama de la Región Carbonífera.

Para el tercer mes del año, se visualiza la llegada de este virus procedente de otro país, “debemos cuidarnos mucho y hacer oración todos los días, pedirle a Dios por nuestra salud y refrendar la fe con quien tengamos cerca”, comentó.

Mediante la lectura de la luz que genera la vela, pudo observar que es algo muy similar a la situación del Covid, que cobró la vida de muchas personas.

“Veo hospitales llenos, también decesos que no se podrán evitar, pero todo está en Dios y en el Niño Fidencio, debemos pedirlo con mucha devoción”, precisó.

Sequía extrema…

Terminando el invierno, las altas temperaturas se dejarán sentir de forma inmediata, rebasando los 50 grados, además de la falta de lluvia durante todo el año que afectará gravemente el campo de la región.

“Desgraciadamente se ven animalitos caer, habrá mucha mortandad porque no se tendrá el vital líquido para sacarlos adelante, es algo que se ve prolongado, durante todo el 2025”, señala.No será fácil levantar a Múzquiz y San Juan de Sabinas a pesar del esfuerzo que harán las autoridades por sacar adelante ambos municipios, debido a lo dañado que están será difícil pero no imposible.

“No será de inmediato, hay mucho trabajo por hacer, se ve un rayo de luz hasta octubre o noviembre, ya a finales del año”.

Para ambas ciudades se pudo observar la llegada de empresas que vendrán a mejorar la situación económica, principalmente para beneficio de los jóvenes.

En el caso de Sabinas, aunque el nuevo alcalde tiene las mejores intenciones, no se tendrá crecimiento, pues las “trabas” durante su administración no lo dejarán desarrollar cada proyecto.

Continúan suicidios

La ola de suicidios en personas de todas las edades será algo que continuará a lo largo de los meses, debido al consumo de sustancias tóxicas y la apatía de las familias que causa depresión en los adultos.

“Es triste ver cómo a pesar de otra pandemia, y la situación difícil que tendremos, también se perderán vidas por la tristeza que aqueja los corazones de las personas, hace falta mucha unidad, mucho amor”, reitera.

La oración puede salvarnos

Cualquier misión que queramos llevar a cabo ha de comenzar, sin duda alguna, por la oración, por la presencia callada de Dios en medio de nuestra labor.

“De otra forma, la base carecerá de tal sentido y perderá el elemento más importante, Dios, solo orando con devoción, poniéndolo todo en las manos del Padre y del Niño Fidencio antes que en las nuestras, podremos llegar a mejorar nuestra entorno”, concluyó el Fidencista.