Nueva Rosita, Coah.- “Me arrancaron el corazón sin anestesia, así nada más te meten la mano y lo sacan”, son las palabras de la maestra Edith Hernández, madre de la menor Valeria Ferniz, quien el pasado 7 de marzo perdió la vida a causa de un imprudente joven, quien además de manejar sin pericia, pretendía culpar a la hoy occisa de lo sucedido.

Consiente de que nada de lo que haga podrá devolver a su hija, narró a Zócalo el sentimiento de tristeza y coraje que la invade por cómo se han dado los hechos, al tiempo de que proporcionó un video y capturas donde aclara que su hija no manejó jamás el vehículo, “ella ya no está para defenderse, pero su familia si”, dijo.

“ Hasta ahora ni Enrique que causó el accidente, ni nadie de la familia ha dado la cara, nadie ha venido a mi casa donde alguna vez se le abrieron las puertas, siempre hostigaba a mi hija, por eso ella terminó una relación de noviazgo que duró muy poco, pero él jamás lo aceptó, es de esos niños chiflados por sus papás que todo solapan, destruyó una familia y no es posible que nada se haga al respecto, donde están las leyes…”, dijo la madre de familia.

Recordó que el día del accidente, Vale de 16 años perdió la vida a las 20:30 horas en la clínica 24 del IMSS, sin embargo le avisaron horas después, “en ese lapso a Enrique se lo llevaron a piso, después de estar en el área de urgencias en calidad de detenido, y para no pisar cárcel los papás movieron sus influencias; el domingo justo cuando llevaban las cenizas de mi Vale a la iglesia yo no pude estar por que fui a audiencia, buscaba seguir adelante porque estaban ensuciando el nombre de mi hija, pero para mí sorpresa lo turnaron a terapia intensiva para que tampoco fuera a prisión, al siguiente viernes, en una segunda audiencia deciden quitarle las esposas, le retiran pasaporte y la única medida fue que solo podrá circular en la ciudad, cuando se supo esto lo pasaron otra vez a piso porque milagrosamente se alivió, fue dado de alta y por la tarde ya estaba en el gimnasio…es totalmente una burla, de él, de sus padres y de la gente del seguro social que lo ayudó, ojalá nunca pasen por algo similar, es un dolor muy grande e irreparable”, comentó.

Con las pruebas en la mano, mismas que entregó a las autoridades, lamentó primero que nada la pérdida de valores como sociedad, “como es posible que a quien alguna vez llamaste amor de tu vida la hayas dejado tirada en un charco de sangre y todavía la culpas de lo que pasó, jamás hizo nada por ver cómo estaba mi hija, al contrario solo buscaba la manera de evadir su irresponsabilidad como hasta ahora, tengo muchos mensajes, amistades de mi Vale que me han dicho como la buscaba, la perseguía, y ese día así fue, la sacó de la escuela, tal vez no a la fuerza, pero fue tanto el acoso que jamás podré entender porque Dios permitió que pasara todo esto”.

Edith está consiente de que a lo mejor ni siquiera llegué la justicia legal, pero dijo que de la divina nadie se escapa, “qué triste que los papás y familia de Enrique quien ha va cumplir 19 años lo solapen en cosas tan graves, ojalá y no le vuelva a pasar algo así a otra novia que tenga y que él no acepte cuando la relación termine, nada podrá regresarme a mi Vale, pero es justo que se conozca la verdad”, precisó.