Ciudad de México.- ¡Triunfo y revancha para Filadelfia! En un partido en el que comenzaron con la desventaja y falta de ritmo, los Philadelphia Eagles silenciaron el Arrowhead Stadium y derrotaron por 21-17 a los Kansas City Chiefs en el Monday Night Football de la Semana 11, el partido de temporada regular más anticipado, al reencontrar a los protagonistas del Super Bowl LVII.

A Philly le costó mucho meterse en el juego, al convertir solo tres de 11 oportunidades en tercera oportunidad (contra 8-17 de KC), pero el último cuarto fue fundamental para que los actuales campeones de la NFC lleven su marca a 9-1, en tanto los vigentes monarcas de la NFL van con foja de 7-3 y tuvieron su segunda derrota como locales.

Jalen Hurts sufrió, pero lideró a su equipo. Completó 14 de 22 pases para 150 yardas y una intercepción, además de que fue capturado cinco veces; pero por tierra le fue mejor, con 29 yardas en 12 acarreos y dos anotaciones, D’Andre Swift fue el caballo de batalla con 76 yardas en 12 acarreos y la otra anotación del equipo.

Patrick Mahomes completó 24 de 43 pases para 177 yardas, dos anotaciones y una intercepción que pudo significar la anotación de la diferencia en la primera mitad; Travis Kelce atrapó siete pases para 44 yardas y una anotación, pero también un balón suelto que pudo significar en puntos para los Chiefs, que pese a que iniciaron mejor, tuvieron los errores en el último cuarto.

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Después de que cada equipo tuvo una posesión de tres y fuera, los Chiefs movieron las cadenas por 80 yardas y diez jugadas, con un acarreo fundamental de Isaiah Pacheco como la jugada grande. Mahomes no falló y encontró a Justin Watson en un envío de tres yardas para colocar los primeros puntos del partido.

La respuesta de los Eagles llegó de forma similar, con un buen pase de Hurts con Devonta Smith para 20 yardas e importantes jugadas que llevaron a Filadelfia a zona de gol. D’Andre Swift corrió cuatro yardas por el exterior derecho y llegó a la zona prometida para empatar el encuentro.

Kansas City despejó el balón en una posesión efímera y Philly tuvo la oportunidad de tomar la delantera. Sin embargo, Hurts no se encontró cómodo por su rodilla tocada y el intento de pase con A.J. Brown quedó demasiado corto, lo que le permitió a L’Jarius Sneed quedarse con el ovoide y regresar a su ofensiva.

Los Chiefs amenazaban con recuperar la ventaja, con los pases de Mahomes para adentrarse en territorio rival. Pero cuando Pat buscaba en las diagonales a Watson, su envío fue muy adelantado y, cuando el receptor apenas se volteaba, vio a Kevin Byard en posición cómoda para interceptar y evitar que la entrega de los Eagles terminara en tragedia.

Pero Filadelfia no aprovechó el cambio de posesión y Hurts fue capturado por Chris Jones para mandar atrás a su equipo y no lograr el down, con lo que se obligó el despeje. Con acarreos de Mahomes y Pacheco, Kansas City regresó a zona roja y Travis Kelce hizo su aparición estelar al convertir la recepción de cuatro yardas; con el punto extra, los de Misuri ganaban por 14-7.

Hurts siguió sufriendo ante los frontales rivales: Trent McDuffie le arrebató el balón y el quarterback apenas lo recuperó, pero perdió yardas en el proceso; no pudo mover las cadenas y despejaron de nueva cuenta. Antes del descanso, los Chiefs sumaron tres puntos con un gol de campo de 43 yardas de Harrison Butker (7-17).

Desde su drive del touchdown, los Eagles batallaron para mover el ovoide, con la intercepción de Sneed y cuatro despejes. No fue sino hasta el tercer cuarto que Filadelfia convirtió en tercera oportunidad, con su conocido Brotherly Shove, esa jugada en la que varios jugadores empujan al quarterback detrás de la línea ofensiva y que ha generado opiniones divididas a lo largo de la temporada.

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Gracias a ese avance, llegó una jugada grande de Philly, cuando Swift esquivó un par de tacleadas, se escapó 35 yardas y metió a Filadelfia en la yarda 15 de KC. Con la confianza recuperada, Jalen encontró a DeVonta en un pase de cinco yardas y, en tercer down, halló un hueco por el lado del guardia derecho para correr esas 10 yardas hasta la zona prometida. Jake Elliott anotó el extra y el partido volvió a ser de una posesión (14-17).

Kansas City tuvo un susto en zona roja cuando Travis atrapó un pase para cinco yardas, pero Bradley Roby le pegó al balón y forzó el fumble, que recuperó Nicholas Morrow. Pero Filadelfia no aprovechó este regalo y desperdició con una posesión de tres y fuera. Mahomes y compañía movieron cadenas, pero un pase incompleto de Mahomes en la 39 de Filadelfia mandó a Tommy Townsend a despejar.

Desde la yarda 20, los Eagles buscaron el drive de la voltereta. Swift atrapó un pase en medio y logró ganancia de 20 yardas; DeVonta se quedó con la recepción de 13 yardas y metió a Filadelfia en terreno de Kansas. Hurts volvió a buscar a Smith, quien en una gran jugada se quedó con el balón y Philly movió las cadenas por 41 yardas, a una de las diagonales. Hurts convirtió el Brotherly Shove y tomó su primera ventaja de la noche (21-17).

Los papeles se invirtieron y a los Chiefs les costó avanzar. Un castigo cuestionable de un movimiento en falto de Creed Humphrey (en la que se creyó en primera instancia que el pañuelo se había lanzado por Brandon Graham) afectó al ritmo de Mahomes, quien no pudo responder y Filadelfia recuperó el ovoide tras el despeje.

Un sujetando de Jordan Mailata comprometió la posesión de los Eagles, que no pudieron recuperarse de un 2da y 22 y despejaron el balón. Gran tacleada de Jobe mandó a los Chiefs a su propia yarda 9. Los equipos especiales de Philly respondieron, le dejaron la última palabra a Mahomes contra la defensa.

Marquez Valdes-Scantling le ganó en velocidad a Bradley Roby, pero el balón le pegó en las manos y no se quedó con él, a pesar de que estaba a unas yardas de la zona prometida; la línea ofensiva colapsó y para tratar de evitar la captura, Mahomes lanzó el balón afuera del terreno de juego, pero se le castigó con 15 yardas por tratar de deshacerse del ovoide sin intención de pase y dentro de la zona de los tackles. En la última oportunidad, el pase con Watson no se dio y Filadelfia logró una victoria y una revancha para mantenerse como el mejor equipo de la Liga.

Con información de Milenio.