En la subcultura mestiza mexicana, siempre está el ingrediente en el que el hablante es el poseedor de la verdad absoluta, claro, no solo aquí, pero critiquemos lo nuestro,

Cuando Díaz Ordaz era presidente, la gente solo lo criticaba por feo, hacían bromas sobre el tamaño de su boca, pero nunca se comentaron actos de corrupción, y vaya que en su gobierno se organizaron unos juegos olímpicos con construcción admirable de instalaciones, y una copa mundial de futbol.

La corrupción se hizo notoria a partir de Echeverría, sumado a un manejo irresponsable de la economía, se dejó de invertir en el campo, solo se tornó a la repartición de beneficios y ayudas.

López portillo tuvo al principio la ebriedad de grandes ingresos petroleros, sumado a un gasto enfermizo y malo en obras, dejadas a cargo de incompetentes, llevando a una profunda crisis que cambio todo el panorama nacional.

Dela Madrid, fue, en todo aspecto, gris, corrupto, una economía desastrosa, un crecimiento acelerado de la delincuencia, tanto que los personajes de gobierno coludidos aún siguen en el firmamento político. Lo único positivo de su sexenio, no fue creado por él: como condición a un enésimo apoyo económico, se iniciaron cambios que abrieron las fronteras, y permitieron la creación de organismos reguladores de transparencia, y democracia, mismos que el actual gobierno trata incansablemente de destruir.

Cuando partidos de oposición tuvieron poder en municipios, estados y país, hubo muchos que no hicieron lo deseado por la ciudadanía, hubo funcionarios que aprovecharon el puesto para enriquecerse, y otros aprovecharon para poner familiares en puestos, buscando el ingreso extra, pero realmente nunca se acercaron a los niveles de corrupción del partido hegemónico ni sus herederos, los grandes poderes que no se atrevieron a tocar fueron las aduanas, ni las policías.

Cuando Calderón era presidente, y el gobierno gringo proveyó enormes cantidades de rifles de asalto a la delincuencia organizada “como investigación del tráfico de armas” donde más facilidad tuvieron los contrabandistas, fue en las aduanas mexicanas, no se diga, el tráfico de carros irregulares.

Sin embargo, tanto Fox como Calderón, a pesar de tener congresos dominados por partidos de oposición, no fueron señalados ni perseguidos por actos de corrupción y ambos volvieron a sus casas de antes, con sus mismas esposas y sin fuero constitucional,

A Fox lo hostigaron por un jeep regalado, que no debía recibir como funcionario, a Calderón, solo la mitología de barrio, le colgaba señalamientos como el que era dueño de plataformas petroleras,

Un congreso dominado por la oposición es una oportunidad dorada de atacar la presidente saliente, un sueño dorado, ver encarcelado a quien detestan los parásitos orgánicos de los partidos, y nunca aceptaríamos argumentos para haberlo desperdiciado, ergo, no tenían algo útil.

La pregunta obligada: ¿Los personajes del actual gobierno aguantarían un proceso por sus actos en su gestión?