El incidente ocurrió la noche del jueves en un domicilio ubicado en la calle San Lucas, en el fraccionamiento San Ramón, en la ciudad de Lerdo, Durango. Este es el tercer caso en menos de 30 días, ya que anteriormente otro menor también ingirió cloro y un tercero, un desengrasante.
En esta ocasión, la pequeña fue ingresada a la Clínica 46 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), lo cual fue notificado al personal de la Policía Investigadora de Delitos, quienes entrevistaron a los familiares para conocer los hechos.
Fue la madre de la menor, Perla Ivonne, de 29 años de edad, quien explicó a los agentes que se encontraban en el domicilio cuando, en un descuido, su hija tomó una botella de plástico que contenía cloro. La mordió, provocando así la ingesta del líquido, por lo que la trasladó de inmediato al nosocomio mencionado.
Voceros de la Vicefiscalía de la Región Laguna exhortaron a padres de familia y a quienes tienen bajo su cuidado a menores, a no dejar al alcance de los niños botellas con sustancias tóxicas, recipientes grandes con agua o instrumentos punzocortantes, a fin de evitar este tipo de accidentes domésticos.