Monclova, Coah.- La familia es importante, porque son quienes saben formar a los hijos; además, la familia son quienes se preocupan por nosotros, quien te busca cuando te pierdes y quien te pregunta cómo estás, sostuvo el padre Juan Francisco González ante los feligreses, en la misa dominical en Santiago Apóstol, en el marco de la celebración del tiempo litúrgico de la Sagrada Familia de Jesús, María y José.

Cabe mencionar que durante este domingo, en todas las diócesis del mundo se realizó la apertura del año jubilar, que ocurre cada 25 años.

Durante la ceremonia fue leído el Santo Evangelio según San Lucas (2, 41-52), que relata la ocasión en que Jesús y sus padres acudieron a la fiesta de Pascua en Jerusalén, cuando el Nazareno tenía 12 años y él se quedó sin que lo supieran José y María.

“Estos, creyendo que estaba en la caravana, anduvieron el camino de un día y se pusieron a buscarlo entre los parientes y conocidos al no encontrarlo, se volvieron a Jerusalén buscándolo”, menciona el pasaje.

“Y sucedió que, a los tres días, lo encontraron en el templo, sentado en medio de los maestros, escuchándolos y haciéndoles preguntas”, añade el texto, que menciona también que, tras ser cuestionado por sus padres sobre lo que había hecho, Él le respondió, “¿Por qué me buscan? ¿No sabían que yo debía estar en las cosas de mi Padre?”.

“Jesús, queridos hermanos, aprendió entonces de su familia a cumplir sus deberes”, mencionó el sacerdote durante la homilía.

“Qué importante es nuestra familia, porque son quienes saben formar a los hijos, qué importantes son ustedes como Iglesia Doméstica (…) porque son quienes ayudarán a sus hijos a sembrar estos misterios de la fe, estos misterios del amor”, añadió.

“La familia también son quienes se preocupan por nosotros… tener quién se preocupe por ti, quién te busque cuando te pierdes, quién te pregunte cómo estás, quién te demuestre su amor, es indispensable para toda persona, queridos hermanos, especialmente para formarnos sanos y equilibrar la mente”, agregó.

“Agradezcamos a Dios el don de nuestra familia, valoremos a nuestras familias y sepamos que es en la familia donde nosotros vamos a experimentar el amor más puro, el amor más verdadero, porque es donde nos recibirán y nos amarán por lo que somos y por lo que tenemos, es decir, por eso mismo que hemos recibido de nuestros antepasados”, enfatizó.