Ciudad de México.- Después de permanecer 10 días retenidos en la Terminal 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), tres menores de edad y su madre, procedentes de China, fueron liberados este domingo.

El Instituto para las Mujeres en la Migración (Imumi) informó que desde el pasado 13 de noviembre contaban con una orden de liberación por parte de un juez, pero el Instituto Nacional de Migración (INM) los mantuvo detenidos.

De acuerdo con la Ley de Migración de México, recordó la organización, está prohibido retener a niñas, niños y adolescentes migrantes por motivos migratorios, y eso incluye que no se les aloje en estaciones migratorias ni lugares habilitados para ello.

“ Recordamos a @INAMI_mx que la niñez y las familias no deben ser detenidas, de acuerdo con la legislación vigente, y que cualquier persona que necesite protección internacional no puede ser rechazada”, posteó en X.

El Instituto dijo a Grupo Reforma que los niños de 3, 9 y 11 años y su madre arribaron a México con una visa de entrada, pero el INM los retuvo por no cumplir con los requisitos de ingreso, sin detallar cuáles.

La familia, explicó, necesita protección internacional, por lo que su llegada al País no debió ser limitada, aun cuando no contara con los papeles requeridos.

“ La familia tiene su visa y su pasaporte, que les permite entrar, es una familia que necesita protección internacional, pero aún si no expresaron que iban a buscar asilo en México, no hay una razón por la que se les niegue”, expuso.

“ Si la familia expresó que necesita protección internacional, el Inami no tiene porqué pedirle ningún documento, es decir, cuando una persona busca protección internacional, no se le debe rechazar, tenga o no documentación”.

El Imumi añadió que las leyes de Migración y Refugiados indican que el INM debió ponerlos en comunicación con la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados para que solicitaran el asilo y que después la instancia revise el caso y decida si se otorga.

En tanto, la organización denunció que los menores y su madre permanecieron en una habitación custodiada, con colchonetas sucias, aire acondicionado excesivamente frío, luz artificial y alimentados con comida rápida que proporcionó la aerolínea que los transportó.