Saltillo, Coah.- Detrás de cada problema jurídico, hay personas: seres humanos que se verán impactados por las resoluciones de la ley, individuos que verán modificado su destino, y justo por ellos, es necesario tener una nueva visión del Derecho.

Irene Spigno presentó su libro “Ser humano en los tiempos de los Derechos”, una selección de su columna semanal “Dialogando con Diké”, publicada en esta casa editorial, Periódico Zócalo.

La directora de la Academia Interamericana de Derechos Humanos, conocida como “La jurista de las emociones”, busca mostrar que el Derecho no es solo una herramienta poderosa para regular la conducta de las personas, sino también un camino hacia una vida más plena, equilibrada y justa para todos.

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Es un libro que nace de algunas colaboraciones que realicé con el Periódico Zócalo, que se publican todos los lunes en un espacio que se llama Dialogando con Diké, y nace un poco de la idea de concebir de manera distinta el derecho, porque el derecho es una herramienta muy poderosa que sirve por y para las personas”, explicó.

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Para poder garantizar justicia y especialmente para poder proteger los derechos humanos, si es necesario tener más empatía, más solidaridad, más amor, y lo tenemos que hacer desde la educación”, detalló.

Desde la Academia trabajan la educación jurídica con enfoque humanista, pero también son necesarias instituciones con esta perspectiva, por ello, realizan capacitaciones continuas con las Fuerzas de Seguridad en el Estado y otras dependencias.

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Creo que cuando estamos hablando de Derecho, cuando hablamos de justicia, de derechos humanos, tenemos que superar esta idea o convicción que por mucho tiempo ha acompañado a la educación jurídica, de que el Derecho es simplemente la letra dura y fría de la ley, porque detrás de cualquier problema jurídico, por muy sencillo o banal que pueda parecer, hay personas”, expresó.

La presentación se realizó en la Feria Internacional del Libro Coahuila 2024, y contó con la participación del rector de la Universidad Autónoma de Coahuila, Octavio Pimentel Martínez; y los magistrados Griselda Elizalde, Luis Efrén Ríos Vega e Iván Garza García.