“Sí somos muchos. Me disculpo con todos, pero eso lo decidió mi papá y mi mamá; somos 14”, dijo Ricardo Monreal, presidente de la Junta de Coordinación Política en la Cámara de Diputados, coordinador del grupo parlamentario de Morena y seguramente la cabeza de la familia Monreal.
Prácticamente todos los miembros de “La Famiglia” son políticos, tanto hombres como mujeres.
Están obsesionados con el poder. Harían cualquier cosa por mantenerse en las altas esferas de la política.
No me quiero imaginar entre ellos las intrigas, las envidias, los resentimientos y los desencuentros.
Como decía el Premio Nobel de Literatura André Gide: “Familias, yo las odio” (“Familles, je vous hais!”).
El escritor francés se refería al hermetismo de los hogares con puertas cerradas y a la envidia entre ellos.
La familia Monreal es un ejemplo de ambición, de avidez y en algunos casos hasta de corrupción, tal como lo señalara la exgobernadora de Zacatecas, Amalia García, actual senadora por Movimiento Ciudadano.
En el 2009, el entonces senador Ricardo Monreal pidió licencia temporal para que pudiera enfrentar una investigación por el hallazgo de 14.5 toneladas de mariguana en una planta deshidratadora de chiles propiedad de su hermano Cándido Monreal, esto ocurrió a finales de enero del mismo año.
A los Monreal no les gusta perder. Cuando Caty Monreal, hija de Ricardo, contendió para la Alcaldía Cuauhtémoc, perdió ante su rival Alessandra Rojo de la Vega.
En una de las tantas entrevistas que le hicieron, manifestó que siempre que la familia Monreal participaba en elecciones, no faltaban las infamias y los insultos contra ellos.
“Pero siempre los Monreal salimos adelante gracias al Creador”. Para ella, hasta Dios es parte de la familia, “porque la verdad siempre aflora”.
Para los Monreal sus adversarios no les perdonan su éxito y su fuerza política.
La patología de esta familia Monreal es muy compleja, ahora resulta que el senador morenista Saúl Monreal, el menor de todos, ratificó su intención de ir a buscar la Gubernatura de Zacatecas y suceder a su hermano David Monreal.
“El que respira aspira”, dijo el que ya se ve en la silla como gobernador. Esta Gubernatura es una de las 16 que se renovarán en el 2027, pero a pesar de que el Senado aprobó el martes 25 de febrero la reforma contra el nepotismo, se cambió para que se aplique hasta 2030.
“Horas después de que la presidenta Claudia Sheinbaum pidiera a Morena que para el 2027 no propusiera a ningún familiar para algún cargo de elección popular y atajar el riesgo de que asomara el nepotismo, el legislador avisó que esperará los tiempos para apuntarse como candidato”, informó Reforma.
Ricardo Monreal asegura que su familia no practica el nepotismo, ya que sus hermanos fueron elegidos por voto popular.
“Saúl tiene su carácter”, afirma su hermano mayor, como diciendo que no está dispuesto a abandonar su propósito.
“Como cualquier persona, quién no aspira a gobernar su estado. Yo sí aspiro, voy a esperar los tiempos, pero siempre lo he hecho.
Estoy trabajando ahorita desde el Senado, pero siempre he tenido esa aspiración y la reitero, esperando los tiempos. Mientras no haya algún impedimento legal en la Constitución, mi aspiración allí está”, expresó Saúl.
Ayer mismo, la presidenta de Morena, Luisa María Alcalde, anunció: “En congruencia con la propuesta de la presidenta Claudia Sheinbaum sobre nepotismo y no reelección, nuestro partido-movimiento no presentará propuestas de familiares en las elecciones locales de este año en Durango y Veracruz”.
¿Por qué no habrá dicho nada acerca del pequeño Saúl, aspirante a gobernar Zacatecas? ¿Cómo entender los absurdos de Morena? Porque el aplazamiento de la reforma sobre nepotismo electoral y no reelección ahora beneficiará: “… a senadores como Ruth González, esposa del gobernador de San Luis Potosí, Ricardo Gallardo, quien aspira a suceder a su marido; a Félix Salgado, quien quiere suplir a su hija Evelyn Salgado en Guerrero; y a Saúl Monreal, quien pretende heredar de su hermano, David Monreal, el Gobierno de Zacatecas” (Reforma).
Cuando era presidente Andrés Manuel López Obrador y mandaba al Congreso sus iniciativas, no se movía ni un punto ni una coma, las respetaban tal cual. ¿Por qué ahora sí se rebelan contra la Presidenta? ¿Será porque es Presidenta con “A”?
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