Las voces que en Canadá claman por expulsar e México del T-MEC están generando un debate intenso, impulsado por un resurgimiento del nacionalismo y populismo en el país de la hoja de maple.
Este fenómeno se ha visto reflejado en las políticas del jefe de Gobierno de Ontario, Doug Ford, y en la postura ambigua del primer ministro canadiense, Justin Trudeau, pese a que dijo públicamente que sin México el T-MEC se acaba.
Fuentes diplomáticas en Ottawa señalan que los políticos canadienses están interesados en enviar un mensaje provocador, culpando a México de los problemas comerciales en Norteamérica.
Este movimiento parece estar influenciado por el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca. Algunos diplomáticos sugieren que esta estrategia podría ser una táctica negociadora de cara a la revisión del T-MEC en 2026, buscando obtener concesiones importantes de México.
La industria automotriz ha sido un punto central en esta controversia. Desde la incorporación de México al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 1994, Canadá ha visto una disminución en su participación en este sector en favor de México.
Doug Ford ha criticado a México por no imponer aranceles a los automóviles chinos, a diferencia de Estados Unidos y Canadá, y ha acusado a México de atraer a fabricantes chinos, lo que podría afectar negativamente a los trabajadores canadienses.
Justin Trudeau, quien ha sido un defensor del T-MEC, se encuentra en una posición complicada. Con una popularidad en declive y enfrentando una fuerte oposición del Partido Conservador, Trudeau ha adoptado una postura más nacionalista de cara a los comicios en su país el año entrante.
Aunque ha defendido el T-MEC como un éxito para los tres países, no ha descartado ninguna opción, enfatizando su compromiso con los trabajadores y la economía canadiense.
El futuro del T-MEC podría depender en gran medida de los resultados de las próximas elecciones generales en Canadá, previstas para finales de 2025.
El líder conservador, Pierre Poilievre, ha prometido una postura firme contra cualquier medida proteccionista de Trump, lo que podría complicar aún más las relaciones comerciales en la región.
Esto apenas empieza.
EL PROYECTO DE Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2025 asignó 12.9 millones de pesos a Litio para México, un incremento de 26.6% en términos reales. Sin embargo, este presupuesto se destinará exclusivamente al pago de burocracia administrativa, sin programas de inversión a la vista. En 2024 se asignaron 9.7 millones de pesos principalmente para nómina. Actualmente, Litio para México no cuenta con bienes muebles ni inmuebles propios. A pesar de la reforma constitucional que declara al litio como área estratégica, el Paquete Económico 2025 no contempla proyectos de explotación del litio.
FIBRA EDUCA ADQUIRIÓ un portafolio de seis inmuebles ubicados en Ciudad de México, Coahuila y Morelos. Esta operación se concretó tras cumplir con ciertas condiciones suspensivas. Ahora, el fideicomiso que encabeza Raúl Martínez Solares buscará la aprobación de la Comisión Federal de Competencia Económica, presidida por Andrea Marván, para finalizar la adquisición del portafolio. Esta expansión refuerza su posición en el sector educativo.
LA SECRETARÍA DE Hacienda y Crédito Público, que capitanea Rogelio Ramírez de la O, realizó su octava operación de refinanciamiento de deuda en 2024, recomprando 152 mil 378 millones de pesos en diversos títulos. Esta medida busca mejorar el perfil de vencimientos de la deuda gubernamental, extendiendo plazos hasta 2043.
LA PRESIDENTA DE México se reunió con la directora de Fitch Ratings, Shelly Shetty. Claudia Sheinbaum defendió el desempeño económico del país, cuestionando la perspectiva negativa de Moody’s, que señala un debilitamiento institucional. Fitch también ha expresado preocupaciones sobre las reformas judiciales en México, destacando posibles impactos negativos en la inversión y el entorno de negocios.
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