Negocios
Publicado el jueves, 13 de marzo del 2025 a las 18:51
Saltillo, Coah.– Que hay atrás de la exitosa marca ‘JR Sombreros’ que hoy viste y calza a todos los vaqueros de Saltillo, la Región Sureste y la Región Centro de Coahuila, así como del área metropolitana de la Capital de Nuevo León: Pues nada más 39 años de trabajo, esfuerzo, constancia y dedicación.
Es don Ramón Cortés Herrera, su fundador, entrevistado en el segmento ‘Impulsores de Saltillo’ del noticiario ‘Despega con Chuchuy’ de TELE SALTILLO quien nos comparte como fue que nació la exitosa negociación que hoy cuenta con 16 tiendas en Saltillo, Ramos Arizpe, Monclova y Monterrey, y que brinda empleo directo a más de 110 colaboradores.
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Fue el 15 de Mayo de 1986, que empecé con la primera tienda aquí en el centro (en la calle de Abbott), con el hambre de triunfar, ya teníamos 15 años en la Iniciativa Privada (trabajando en la industria), y todo ese tiempo tuve la intención de independizarme, y viendo el crecimiento que tenía la corriente vaquera, cuando Manolo Jiménez Flores empezaba a traer a Saltillo aquellos rodeos en el Lienzo Charro ‘El Rayito’, por eso fue que pensé en este giro”, afirma nuestro entrevistado, con gran satisfacción.
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Dios le da a uno habilidades y talentos, y los puse en práctica y en marcha, pidiéndole a Dios que nos diera la línea, y afortunadamente, y Gracias a Dios, Saltillo se fue convirtiendo con el paso del tiempo en ‘La Ciudad más Vaquera de México, y de América Latina’, y bueno pues pusimos todo el empeño, y a trabajar, para poder sacar a la familia adelante”.
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Comencé con sombreros y ropa vaquera, y luego incluí un poco de productos de charrería, tratando de mover y ofrecer más cosas, y también incluí botas industriales ‘Hércules’ que fabricaba un amigo, quien que me dijo ‘si te vas a ir a Saltillo, conquístame la plaza de General Motors para entrar con mi producto”, fui y hablé con la gente de compras, y me recibieron la propuesta”.
CLIENTE DE LUJO…
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Con tan buena suerte que un día llegó a la tienda, el señor Robert G. Stramy, Director General de General Motors Ramos Arizpe, le gustaron las camisas charras, se las midió pero las mangas le quedaron muy cortitas, él era muy alto; Le dije que en 10 días se las tendría a la medida, y así fue, le hable que ya le tenía cuatro camisas y vino por ellas, y le quedaron a la perfección”.
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Me dijo ‘Very good, how much’, y le conteste, que sería una cortesía, de mi parte, cuando me dijo ‘que puedo hacer por ti’, le dije ‘recomiéndeme’ y le explique que estaba concursando para el contrato de las botas, y de inmediato me contestó … ‘es tuyo’, y narra con gran gusto, que ahí comenzó una fructífera relación de trabajo”.
JR siguió adelante con su tienda vaquera
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Con sombreros, ropa y muy enfocado en el servicio personalizado a mis clientes, pero un día mi hijo, me dijo ‘yo le entro a las botas vaqueras, yo solo tenía unas cuantas, y afortunadamente dio muy buenos resultados, y luego él mismo diseño la marca de ropa ‘Reining’, y eso fue un gran acierto, sumando los nuevos talentos y nuevas ideas” y eso fue definitivo para que esto fuera hacia arriba”.
Cuestionado sobre el Saltillo de aquellos finales de los 80’s, don Ramón comenta: “solo había la mitad de los habitantes que hoy tiene la ciudad, lo fuerte era la General Motors, y apenas empezaba a despuntar Chrysler, hoy vean todo el crecimiento que han generado, no hay manera de pararlos”.
LOS SEÑORES RECIO
Recuerda don Ramón a comerciantes de aquel primer cuadro de Saltillo: don Rene Molina del Café Viena; don David Cabello, de Casa Cabello; por supuesto, don Armando Gutiérrez, de la Mueblería Gutiérrez, la Zapatería La Valenciana de Don Asis Talamás, entre otros.
También comparte que había contados negocios de su giro, como ‘Botas Recio, y el otro negocio de don Pepe Recio, quien ya falleció hace algunos años, y por supuesto otros comercios como los instalados en el Mercado Juárez, de quienes dice “no tenían cultura de la moda’, y nosotros si venimos a darle ese toque de moda a la ropa vaquera’
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Por eso fue el mote de ‘La Boutique de los Vaqueros’”, y platica como anécdota que fue muy criticado cuando mandó elaborar 200 camisas rosas, “y que tal que llegó ‘El Secreto en la Montaña’ y se acabaron todas”.
Y hablando de secretos le preguntamos cuál ha sido el secreto del éxito de JR, y destaca que “el único modo de conquistar a la gente, está en la atención personal, en el conocer sus tallas, sus gustos en colores y estilos, al principio lo hacíamos nosotros mismos, luego tuvimos que ir contratando gente para responder al crecimiento que íbamos registrando, y hoy son ya más de 110 colaboradores”.
EL TRABAJO DE RAMON HIJO
Nuestro entrevistado destaca el trabajo, visión, creatividad y buen ojo comercial de su hijo Ramón, quien dice “expandió el negocio a plazas comerciales, y quien ha tomado decisiones muy acertadas: por ejemplo estábamos en Plaza Patio, pero las rentas eran muy altas, y tuvo la
idea de cambiarse a un local en el bulevar Eulalio Gutiérrez y la gente se fue con nosotros, y lo mejor, pagando la cuarta parte de la renta”.
Comenta que el buen rumbo que llevan los negocios bajo la administración y cuidado de Ramón hijo, es el resultado de todo lo que él supo inculcar a su familia: “Cuando uno tiene a sus hijos chicos, les inculca uno el trabajo, valores y principios, para que siempre actúen bien y no sean malagradecidos”.
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Yo mantengo lo que dice la biblia: ‘honra siempre a tus padres para que tengas anchura de vida y lleguen más beneficios, yo lo hice con mis Padres, y hoy lo mismo están haciendo mis hijos conmigo”, expresa con gran satisfacción.
LA PANDEMIA, LO MÁS DIFÍCIL
En relación al momento más complicado de toda la trayectoria de sus exitosos negocios, don Ramón dice: “sin duda alguna, la pandemia, fue muy difícil, cerramos algunas tiendas, se redujeron horarios, casi no salíamos, fue una etapa muy crítica, y no solo para nosotros, lo fue para todo mundo, pero afortunadamente poco a poco fue pasando, y ya después las cosas fueron volviendo a su nivel”.
¿Qué es para usted un cliente?
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Una persona a la que hay que cuidar mucho, como a la niña de tus ojos, a quien hay que brindar lo que necesitan, porque prácticamente son nuestros socios, son quienes hacen posible que exista el negocio, y quienes han sido la clave de nuestro crecimiento”.
¿Qué es para usted un empleado?
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Pues un colaborador, a quien se debe apoyar y cuidar al máximo, y a quien hay que brindar todas las herramientas para que hagan bien su trabajo, y a quien hay que cuidar para que se aplique mucho más y de mejores resultados”.
CLIENTES DE TODO EL PAÍS
Con gran satisfacción don Ramón dice que JR Sombreros tiene clientes de muchas ciudades: “de Torreón, General Cepeda, Parras de la Fuente, pero también estudiantes de la Narro de muchos estados del sur del país: Michoacán, Chiapas, Oaxaca, y muchos que ya se graduaron, cuando regresan a los eventos de la universidad, vuelven a venir, y traen a sus hijos, y en algunos casos a sus nietos, y recuerdan que aquí compraron sus sombreros, sus botas, su ropa”.
MUY AGRADECIDO CON SALTILLO
Originario de Galeana, Nuevo León, don Ramón recuerda que llegó a Saltillo a la edad de ocho años, “con el hambre de salir adelante, estudie en el tec, me gradúe, trabaje 15 años en empresas, luego regresamos y nos independizamos”.
Se dice muy agradecido con todo lo que le ha dado nuestra ciudad, que le brindó la oportunidad de emprender un negocio, “así como de poder heredar un buen ejemplo a mi familia, no hay más que seguir adelante y eso es lo que uno le pide a Dios, salud y sabiduría para manejar las cosas, y aprovechar los talentos que nos brinda, y pedirle que nos siga bendiciendo”.
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