La empresa se mantiene atenta al desarrollo de tecnologías emergentes, como la electrificación de los equipos de minas, el almacenamiento en baterías y la producción de hidrógeno verde, que podrían aplicarse para alcanzar la aspiración de ser neutrales en emisiones de CO2 para 2050.
Como ejemplo, la compañía está explorando un proyecto para sustituir combustibles fósiles con hidrógeno verde en los autobuses de transporte de personal y, eventualmente, eliminar emisiones de los camiones mineros. Asimismo, adquirió un camión eléctrico de bajo perfil, el cual quedó registrado como el primero en su tipo en el sector minero en México.
Inició también la ingeniería conceptual para la integración de proyectos de generación de electricidad local para algunas operaciones, con el fin de sustituir el suministro no renovable con energía limpia.
Además, la empresa cumple en tiempo y forma con el requisito de adquirir Certificados de Energía Limpia (CEL) suficientes para las obligaciones correspondientes en los porcentajes establecidos por la Secretaría de Energía y conforme a lo estipulado por la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
Actualmente, más de 35% de la energía que consume la compañía proviene de fuentes renovables, a través de sus parques eólicos ubicados en Oaxaca, Coahuila y Tamaulipas.