La desaparición del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales estaba más que anunciada. Quizás por eso no nos sorprende la celeridad con que actuaron ciertos diputados al servicio del gobierno, para iniciar el desmantelamiento de todos los organismos autónomos.   

Si bien no nos sorprende, sí nos ofenden y afectan a los ciudadanos las decisiones que toman quienes se sienten los dueños de México. Decisiones y acciones que son verdaderos atentados a nuestras instituciones. En este caso al INAI y demás órganos en lista de desaparecer.

Una serie de barbaridades y atrocidades creadas en una mente enferma de poder, donde aflora el coraje y el odio acumulado.

Ese odio aterrador, que mostró en diferentes etapas de su vida, López, un hombre que engañó vilmente a un pueblo noble como el nuestro que creyó lo que decía en sus discursos.

Discursos con frases hechas y pronunciadas por dictadores que destruyeron la democracia en su país y empobrecieron a su gente. 

Falsos e hipócritas, eso son los verdugos que se encuentran alzando la mano para aprobar todo lo que se les indica. Porque nadie puede negar que obedecen órdenes “superiores”; por eso los errores que se pretenden enmendar con un “fe de erratas”; por eso los exhiben sus colegas de otros partidos como ignorantes.

Por eso también “cantinflean” al pretender defender su posicionamiento y su voto. No saben qué decir, cómo explicar y caen en contradicciones.

Mejor sería que reconocieran que son ignorantes y serviles; por eso se han convertido en vergonzosos lacayos. Que lo que están haciendo desde el congreso y el senado no es para favorecer al pueblo al que aseguran servir.

Es conocido que a Morena y a sus aliados del partido verde y del trabajo y uno que otro traidorcillo agregado para darle la mayoría requerida, no les importe que los ciudadanos nos quedemos sin organismos autónomos que sirven de contrapeso al gobierno.

Ellos solo actúan por mandato y si no tienen los votos que se requieren, acuden a la “lista negra” para ver cómo y de dónde pueden presionar a algunas personas y conseguir la mayoría.

Diputados y Senadores “levantadedos” son la vergüenza en un maravilloso país que requiere de gente preparada, respetable y con profundo amor a México.  

Estamos conscientes que esas personas sí existen y afortunadamente no forman parte del bloque destructor que hoy representa a sus propios intereses y no los de los ciudadanos.

Cuarenta millones de mexicanos no votamos por la destrucción de nuestro país; por el contrario, salimos a emitir nuestro sufragio para rescatarlo de la mediocridad, del desorden, de las corruptelas disfrazadas de bienestar.

Tenemos el derecho de exigir cuentas y para eso se crearon organismos autónomos.  ¿Quién habrá de darnos información acerca del fraude en Segalmex? ¿Dónde están los responsables? ¿Por qué subieron los costos de los proyectos inútiles del expresidente? ¿Dónde está el dinero de la rifa y luego venta del avión presidencial? Ese que ni Obama tenía.  

¿Qué pasó con el dinero de los fideicomisos? ¿Por qué en los estados gobernados por MORENA está la violencia desatada? 

Son unas cuantas preguntas que, al no ser respondidas, la duda permanece. Por lo que al haber infinidad de cuestionamientos que esperan respuesta, tarde o temprano tendrán que responder los que hoy se ufanan de un triunfo en las urnas que dejó más dudas que convencimiento.

Además, el partido verde ecologista tendrá que responder ante los mexicanos, por qué permitió se talaran miles de árboles para la colocación de vías férreas para el tren maya; pero además ¿a dónde fue llevada la madera de los árboles? ¿Se vendió? ¿Cuánto se recaudó? ¿Quién o quiénes participaron en el negocio, si lo hubo?

Así es que eliminan el INAI y los organismos autónomos por supuestas corruptelas; lo mismo el Poder Judicial y todo lo que se les ocurra. Sin embargo ¿no se han dado cuenta lo que nos va a costar la elección de jueces y demás?

Por supuesto que sí lo saben. Como los ciudadanos también sabemos que lo que pretenden es tener el control de todo. No les importa México, solo les importa el poder y adueñarse de todo lo que puedan.

¿La violencia? ¡Qué importa! Al fin y al cabo, les pagamos camionetas blindadas, viajes en aviones privados y escoltas para que los cuiden.

¿Y el pueblo? Con su pensión bienestar tienen.