Ramos Arizpe, Coah.- A pesar de que el Reglamento de Alcoholes Municipal prohíbe bailar en los restaurantes-bar de la ciudad desde hace años, un integrante de la Asociación de Bares y Restaurantes exhibió al negocio El Monasterio de violar la ley, al publicar una foto en las redes sociales donde bailan alrededor de 15 parejas el pasado domingo a la una de la mañana.

El restaurant-bar está ubicado en el bulevar Las Torres de la colonia Molinos del Rey, casi en frente del edificio que alberga la Central de Bomberos, así como las direcciones de Protección Civil y la Policía Municipal.

El dueño de un bar y dos integrantes de esta agrupación demandaron al director de Servicios Concesionados Francisco Vázquez Ramos piso parejo para todos y no pueden permitir que unos sí lo hagan y otros no.

Los tres quejosos omitieron sus generales para no tener problemas con el presidente de dicha asociación, Juan Antonio Pedraza Martínez, ni con Vázquez Ramos, así como con el Secretario del Ayuntamiento, Alejandro González Farías, debido a que su papá, Jaime González, es dueño del negocio Los Nogales.

“ No solo el Monasterio viola el reglamento sino también La Prieta Linda, El Quetzal, El Belmont, La Buchona y El Yoger, permiten bailar a los clientes. Además, aprueban el acceso de menores”, dijo uno de los miembros molesto.

A diferencia de Saltillo y Arteaga, en Ramos Arizpe no está permitido bailar alrededor de la mesa ni en pista mucho menos, ya que el Reglamento de Alcoholes establece que no están autorizadas las pistas de baile en este tipo de negocios en la localidad, quien lo permita será multado y si reincide se clausurará el lugar.

Actualmente, las multas van desde los 8 mil pesos cuando es la primera vez, si es reincidencia sube a 16 mil pesos y 15 días de suspensión. Si el negocio recurriera, se aplicaría una clausura temporal por 3 meses o clausura definitiva de la licencia.

Los tres integrantes de la asociación solicitaron a las autoridades municipales la implementación de operativos nocturnos en todos los bares y restaurante con el objetivo de que no viole el Reglamento Municipal.