Teresa Quiroz | Arturo Estrada Alarcón | Saltillo.- Luego de haber sido ignorado por la Delegación de la Secretaría de Bienestar para el proceso de vacunación, el Subcomité Técnico Regional Covid-19 Sureste levantó la voz y se acordó tomar acciones para evitar poner en riesgo a la población.

Incluso, hasta el teniente coronel de Infantería, Hermes Elías Oliva Ortiz, representante del Ejército Mexicano en el Subcomité, externó su malestar y advirtió la importancia de contar con apoyo externo para garantizar la seguridad de la población, ya que, de acuerdo con su experiencia, “el punto ubicado en las instalaciones de Canacintra no es seguro para los beneficiarios”.

Se dio a conocer que el propio Ejército no fue avisado con tiempo de este proceso, por lo que se destacó la necesidad de trabajar en conjunto con los diferentes órdenes de Gobierno, además de tener una adecuada coordinación entre todos los participantes.

Se reiteró la disposición de trabajar en conjunto con el Gobierno federal en el proceso de vacunación contra el Covid-19 para adultos mayores en Saltillo.

De acuerdo con los Servidores de la Nación que se encontraban en el primer filtro de acceso para la vacunación en la Ciudad Universitaria de la UAdeC en Arteaga, hasta las 19:18 horas contaban con 250 dosis listas para su aplicación, sin embargo, a consecuencia del mensaje viralizado en redes sobre la existencia de dosis, fue que aumentó el número de interesados en recibir el biológico.

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En cuestión de minutos hizo que la fila se incrementara, pero seguiremos vacunando conforme vengan llegando; témenos citas desde las 8 de la mañana hasta las 13:00 horas y luego hacemos un receso para atender a los que no tienen cita, y así es como estamos trabajando”, expresó uno de los Servidores de la Nación.

La falta de coordinación entre estos, ocasionó que algunas personas que acudieron al lugar para ser inoculados, bajo la modalidad peatonal, fueran devueltas, situación que los obligó a pedir aventón a los automovilistas que ya hacían fila.

Destacó el caso de un hombre de 74 años que, después de conseguir el favor de ser trasladado, estuvo a punto de ser bajado del vehículo por los Servidores de la Nación, alegando que no podía ingresar a las instalaciones si el vehículo no pertenecía a su familia.

También se hizo notar el de una mujer que, acompañada por su hijo invidente, tuvo que caminar poco más de un kilómetro, desde la entrada principal de Ciudad Universitaria hasta el punto de acceso vehicular, donde se dispuso a apelar a la buena voluntad de algún ciudadano que le ayudará ser vacunada bajo la modalidad de “drive trhu”.

En tanto el delegado del Gobierno federal en Coahuila, Reyes Flores Hurtado, no precisó la procedencia del mensaje en redes ni condenó o deslindó de responsabilidad al o los que jugaron con el tiempo y esperanza de los adultos mayores.

Apoyarán ‘desde afuera’

El Subcomité Técnico Regional Covid-19 refrendó su compromiso de ayudar en la logística de la vacunación que encabeza la Federación, aun cuando esta descartó  trabajar en conjunto.

Ante esta postura, se acordó que sí colaborarán –dentro de lo que tengan permitido– para garantizar la seguridad de la población.

Se colocarán toldos para mitigar el sol, puntos de hidratación y apoyo vial por parte de la Dirección de Policía y Tránsito, servicios médicos de Protección Civil y Bomberos, además de colocar baños portátiles y sillas.

El director del Hospital Universitario, Lauro Cortés, señaló que, aun cuando la mayoría de las autoridades municipales y estatales no fueron convocadas a participar en el proceso, es de suma importancia tomar acciones para evitar que se repita el desorden que se dio durante el primer día, y no poner en riesgo a los adultos mayores, quienes son más propensos a un malestar durante su estancia en la vacunación.

Incluso trascendió que a los alumnos de Medicina que apoyaron en la vacunación no les dieron de comer, pese a la extensa jornada de más de 12 horas seguidas.