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Eres de los que critican o eres empático; sino vas a decir algo positivo, mejor calla

Por Ramón Rocamontes

Hace 3 años

Hoy, quise abordar un tema que se ve cada día más y de manera cotidiana, y de igual forma en pleno tiempo de pandemia, se agudiza, tanto en la familia, en el trabajo, en el deporte. En todo el entorno de la Vida.

Una pregunta con la que quiero iniciar dicho tema. Sería, ¿Tú te quedas callado en los momentos cuando debes hacerlo?. O hablas y te descargas sin pensar, aunque ofendas en ocasiones o quizá, en otras lo haces de manera consciente.

Seguramente amigo lector, usted se preguntará, pues depende del tema en el que se enfoque. Si es correcto, sin embargo, tenemos experiencias cotidianas, vividas o bien vistas y otras presenciadas, pero desde luego existen hasta en las mejores familias y reuniones o charlas de diversos niveles sociales.

En la biblia, dentro del capítulo uno, del versículo 15 de Proverbios, dice, “La suave respuesta aparta el furor, más la palabra hiriente hace subir la ira”.

Podemos decir, que algunas palabras y en ocasiones los silencios, son grandes elementos, para transmitir emociones, por lo que desarrollar buenas habilidades comunicativas, nos ayudará a tener una mayor salud mental, pero además podrán ser clave para obtener el éxito personal y profesional.

Hace unos años, me tocó saludar a un conocido, cuando fui por uno de mis hijos a su escuela. Saludé a esta persona con efusividad por el tiempo de no verlo, y después de preguntarle: ¿Cómo estás?. Me contesta, “Que jodido te ves, que te pasó?. Le contesto con una sonrisa: “Me da gusto saludarte, tú te ves muy bien”. Y me dí media vuelta y seguí mi camino.

En otra ocasión, me tocó estar con unas personas, en un entrenamiento, con algunos coaches y jugadores, a los que deje de ver por este tiempo de pandemia, y lo primero que escuche a alguno de ellos, que le dice a una tercera persona, ¿Que te panzó?. Obviamente imaginará usted la cara que puso éste, al que le dijo.

Tiempo después en una oficina a la que visito de manera cotidiana, de igual forma, saludé a una compañera, que se aplicó y bajo de peso, después de hacer ejercicio, y con una combinación de alimentos balanceados, logró verse más delgada.

Por la razón del ejercicio, y la pérdida de peso, se ve diferente, en busca de tener una mejor calidad de vida; pero eso no es lo interesante, ya que momentos más tarde, una persona allegada, le preguntó, ¿estás enferma?, “Te ves muy delgada”, a lo que categóricamente, otra le dice, “Estuvo haciendo ejercicio”.

Estimado amigo, todos y cada uno de nosotros, tenemos percepciones diferentes de las cosas y la percepción cada quién, la observa con diferente óptica.
Por ejemplo, en el deporte, en cualquier disciplina, si a alguien se le fue un balón o una pelota, uno podrá pensar que fue un error de concentración; otro replicará con una mala palabra o bien, otros, seguramente le recordarán a un familiar; sin embargo, este es un proceso que va de acuerdo a la educación o cultura con la que contamos como personas pensantes, incluso hay quien juzga o critica sin siquiera antes haber practicado eso que critica o conocerlo a fondo.

En la actualidad, nuestra comunicación asertiva, se ha visto mermada, por desconocimiento o en ocasiones, por el poco desarrollo de la inteligencia emocional, que tenemos.

Otras veces, por causas que cada quién sabe lo que, “trae en el morral”, y aunque en este tiempo de encierro, donde lamentablemente muchas personas se han visto afectadas en sus emociones a causa de la pandemia; ocasiona ciertas sintomatologías, incluso a algunas de ellas, les ha afectado con ataques de ansiedad o angustia, lo que los ha hecho que se cierren, por la disminuida capacidad, y que no ha sido fácil para nadie. Si hasta los atletas de alta competencia, han tenido picos de estrés y ansiedad debido a ésta lamentable contingencia.

Por ahora, en estos tiempos, deberíamos aprender a silenciar nuestra boca, mientras permitimos que otros, conozcan de la importancia de no quedarse callado, lo que puede coadyuvar a uno de los más grandes gestos que se le puede ofrecer a las personas con las que convivimos a diario o al menos nos conocen.

Hace muchos años, el psicólogo Albert Mehrabian, descubrió que el lenguaje que se usaba, de manera efectiva, y del cuerpo tiene una importancia relativa en la comunicación de un 55%, el tono de voz un 38% y las palabras utilizadas un 7%.

El componente verbal es para informar y el no verbal, para comunicar estados, gestos y actitudes.

Lo anterior, son los tres diferentes tipos de canales de comunicación de los que disponemos: la palabra, la voz (el tono y ritmo que usamos al hablar) y el lenguaje corporal (gestos, posturas, expresiones faciales). Su intención era la de revelar qué canal de comunicación era el más dominante.

Ahora con este tiempo de pandemia, muchas personas han dejado de hacer muchas cosas, por la incertidumbre de cómo están las cosas ya con casi dos años de esta contingencia.

Lamentablemente, la incertidumbre, es la vitamina que alimenta al miedo y el miedo es lo que te hace reaccionar, para cometer los peores errores.

Estimado amigo, te dejo este dato revelador, y muy poco mencionado; si las personas se ocuparan en sus metas, con el mismo ímpetu o motivaciones, como lo hace con sus preocupaciones. El éxito estaría asegurado sin duda alguna.
Por otro lado, te comento que las personas excesivamente críticas, las que se quejan, producen cardias. Y como consecuencia, deja una permanente cardialgia, que es un dolor agudo, que se siente en las cardias, ubicadas entre el esófago y el estómago. Lo que puede provocar una opresión en el corazón, y como consecuencia desembocar en un infarto. La crítica no nos lleva a ningún lado, el trabajo sí.

Así es que ocúpese de sus asuntos y sea empático, pero si tiene algo bueno que decir, dígalo con voluntad y si no; mejor guarde silencio y respete; pero sobre todo valore su tiempo que es el más preciado de su vida.

No olvide, que el mayor activo que tenemos en nuestra vida, además de la salud, es nuestro tiempo; y todos sin duda alguna; personajes de la mejor posición económica, otros de nivel medio y hasta los que no tienen la misma condición social, tienen todos los días, los mismos mil 440 minutos, para hacer lo mejor con su tiempo.

Recuerde, que es el tiempo, que pases con tu familia, trabajando o haciendo lo que te gusta o apasiona. Lo puedes invertir de la mejor manera y usarlos como mejor te convenga.

Los minutos y el tiempo, no se pueden ahorrar para mañana o guardar como el dinero, para otro día. Debes aprovechar y al otro día si tienes la fortuna de vivir, vuelves a contar con esa misma cantidad de minutos. Úsalos sabiamente, a esos sí, célalos como algo muy preciado para ti y nadie más que para ti,

Por otro lado, en estos tiempos, más que el miedo, que ha imperado en muchos lados, debemos potenciar en nuestra vida y entorno, las substancias vitaminas para nuestro beneficio.

Primero, las endorfinas, que se producen con el ejercicio físico, activarnos físicamente y desde luego también, buscar el bienestar y placer, para liberar este neurotransmisor, llamado dopamina.

Mientras que para liberar serotonina, lo puedes hacer hablando de tus sentimientos con personas de confianza, y de igual forma descansar, la higiene del sueño y llevar a cabo una buena alimentación.

No podemos olvidar a la oxitocina, que potenciada en nuestra vida: colabora a la disminución del cortisol.

Hoy en plena pandemia, la oxitocina podemos decir que es la hormona de la empatía, y ahora que no hay muchos abrazos, por la sana distancia; los abrazos ayudan a potenciar dicha hormona, que es la de los vínculos, y las relaciones humanas, pueden ser transmisores de estas sustancias, producidas por las personas vitamina.

Finalmente, amigo lector, te digo que potenciar el autoconocimiento de mejor manera. Esto sin duda nos evitará enfrascarnos en problemáticas de hablar de más o cometer errores de los cuales, después podríamos sentirnos con un sentimiento de culpa. Quizá la clave sería, hacernos prontos para escuchar y tardíos para hablar.
Hasta la próxima!.

Recomendaciones para ser más empáticos
Desarrolle de manera óptima la inteligencia emocional
Simpatiza con los que viven
Utiliza el sentido común
Si no tiene algo sabio que decir, mejor calle
Desarrollar la comunicación asertiva
Siempre dar un feedback positivo
En ocasiones, callar es una manera sabia de comunicar
Menciona las cosas buenas de la persona que tienes enfrente

 

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