Saltillo, Coah.- Encender la estufa les costó la vida a los tres agentes de la Fiscalía que murieron en la explosión registrada en un domicilio de la colonia Santa Fe Cactus, tras una acumulación de gas. 

El fiscal general del Estado, en conjunto con el equipo multidisciplinario de Servicios Periciales, dio a conocer los avances que se tienen en la investigación sobre la explosión ocurrida la mañana del miércoles, en la que tres elementos de la Agencia de Investigación Criminal perdieron la vida y dos más resultaron con lesiones graves. 

Las conclusiones de los peritos especializados confirman que la explosión fue producto de una acumulación de gas en el domicilio, la cual se produjo en la cocina cuando uno de los agentes intentó encender la estufa. 

La perito químico Andrea García señaló que los cilindros de gas están diseñados para no explotar, ya que solo contienen el combustible, y para que se produzca una explosión o un incendio es necesario que haya oxígeno. 

“

Se dio una fuga en la cocina, en la zona en que según los planos que nos entregaron se encontraba la cocina, ahí encontramos la estufa; en el lugar nos dimos cuenta de que una de las perillas estaba abierta”, explicó.

El reporte pericial señala que uno de los agentes encendió un fósforo sin percatarse de que el gas se estaba escapando, produciendo la explosión.

Respecto a la muerte de los tres agentes, el médico forense Alejandro González Reséndiz explicó que los dos agentes que quedaron atrapados no habían muerto por asfixia, sino que fueron aplastados por la losa al derrumbarse la casa. 

Así, la necropsia reveló que Alejandro Zamora murió por un golpe en la cabeza cuando le cayó la estructura, mientras que Ricardo Gámez fue aplastado y la presión le reventó los pulmones. Alejandro Saavedra fue identificado como quien prendió el fósforo que ocasionó la explosión. 

Finalmente, el perito Alejandro de la Rosa expuso que la casa se derrumbó debido a que la estructura se encontraba en malas condiciones y la explosión tumbó la pared de soporte.

De los oficiales que sobrevivieron, el fiscal Gerardo Márquez Guevara señaló que uno ya se encuentra en recuperación y podría ser dado de alta este viernes, mientras que el otro permanece en terapia intensiva debido a las quemaduras que sufrió.