Hasta ahora, los 38 municipios de Coahuila, incluyendo los renuentes Torreón y Francisco I. Madero, se encuentran en el mismo canal para integrarse al Mando Unico Policial.
De acuerdo con el gobernador Manolo Jiménez Salinas, los amagos del crimen organizado para penetrar a Coahuila a través de estados vecinos, donde la violencia es incontrolable, no son para menos y la coordinación entre las corporaciones de seguridad pública es pieza clave para evitarlo.
El encargado de mantener la sintonía es el titular de la Fiscalía General del Estado, Federico Fernández Montañez y por el reporte que compartió este martes con el gobernador, los 38 alcaldes están en el mismo canal.
Aún y con lo anterior, a más de uno llamó la atención que Román Alberto Cepeda González no estuviera en la ceremonia de graduación de 491 cadetes de la Agencia de Investigación Criminal y de la Policía del Estado, en Torreón.
“Está fuera de la ciudad por motivos personales”, dijo el gobernador, ante la ausencia del alcalde, quien envió como representante al primer regidor, Luis Cuerda Serna.
La ausencia de Román se dio en el contexto de dos circunstancias: la nueva etapa de la relación institucional estado-municipio, y la urgencia de mantener consolidado el sistema de seguridad pública de la región Laguna, ante la amenaza de los grupos criminales de entidades vecinas, Durango y Sinaloa, por ejemplo.
En el evento tampoco estuvo la alcaldesa de San Pedro, Brenda Güereca, quien en la mañana se reportó desde Saltillo. De hecho, estuvo en el evento del 69 Batallón de Infantería, en donde el general Jesús Alejandro Adame Cabrera inició funciones como comandante de la Sexta Zona Militar.
En la ceremonia de graduación de los cadetes policiales coincidieron la diputada Luz Elena Morales Núñez, presidenta de la Junta de Gobierno del Congreso del Estado, y el magistrado Miguel Felipe Mery Ayup, presidente del Tribunal Superior de Justicia, para quien el gobernador Manolo Jiménez tuvo mención especial por abonar a que Coahuila mantenga los índices de seguridad pública y de paz social, que se puede presumir.
Próximo al gobernador también se vio al secretario de Desarrollo Regional de la Laguna, Eduardo Olmos Castro, y para reiterar que la coordinación en el combate a la inseguridad es completa, participó el general Alberto Ibarra Flores, comandante de la 11 Región Militar. Todos andan en lo mismo.
La superdelegación en Coahuila, heredada de la administración de Andrés Manuel López Obrador, empieza a destapar el incómodo fenómeno de los aviadores. Cerca de 20 personas que cobraban sin trabajar o utilizaban sus sueldos públicos para operar en tareas de Morena fueron detectadas y eliminadas de la nómina, ahora bajo la coordinación del tamaulipeco Américo Villarreal Santiago.
Pero la duda es si el asunto quedará solo en despidos, o habrá consecuencias legales para quienes permitieron esta práctica, y en la lista están desde Reyes Flores Hurtado, hasta Claudia Garza del Toro y el mexiquense Marcos Gibrán Corona, pasando por Aída Mata Quiñones… Todos los ex superdelegados están bajo sospecha de facilitar estas irregularidades.
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