Ciudad de México.- El 22 de septiembre de 2002 marcó un trágico hito en la vida de Laura Zapata y Ernestina Sodi, quienes fueron secuestradas en un evento que conmocionó al mundo del espectáculo en México.

Cuando salían de un teatro en la Ciudad de México, después de la actuación de Laura en La casa de Bernarda Alba, las hermanas de Thalia fueron víctimas de un grupo criminal que las mantuvo en cautiverio durante varios días.

El día que Laura Zapata y Ernestina Sodi fueron secuestradas

En 2002, Laura Zapata y Ernestina Sodi (quien murió la noche del viernes 8 de noviembre) fueron secuestradas por un grupo criminal. El incidente ocurrió en las inmediaciones del Circuito interior, cerca del entonces Cine Cosmos, cuando ambas salían de un teatro en la Ciudad de México tras la actuación de Zapata en la obra La casa de Bernarda Alba.

Durante una entrevista con Yordi Rosado en su canal de YouTube, Laura Zapata profundizó en el traumático acontecimiento del secuestro, que ella misma describió como “un rayo que me cayó encima y me partió en millones y millones de pedazos”.

En la conversación, Laura compartió cómo sucedieron los hechos, así como también sus emociones y reflexiones sobre la experiencia, y reveló cómo este episodio impactó no solo su vida personal, sino también sus relaciones familiares.

“ Empezamos a ver una camioneta con un coche como que se están peleando y de repente vemos que de la camioneta baja un cuate con armas largas y le digo: ‘Wow, traen armas largas y vienen hacia nosotras’. Con la culata del arma rompe mi vidrio, yo me quité un anillo de brillantes y me lo metí en el busto, abrí la puerta y dije: ‘Que se lleven el coche’”, relató.

Una familia llena de historias:

La actriz reveló que los secuestradores exigieron un pago por parte de su cuñado, Tommy Mottola, esposo de Thalia. La presión sobre la familia fue intensa y la solicitud de un rescate por parte de los secuestradores generó una situación de angustia y tensión que afectó a todos los involucrados en el drama del secuestro.

“ Esto es un secuestro, no es nada personal, queremos el dinero de Tommy Motola y queremos 5 millones de dólares”, recordó la actriz.

La actriz de La intrusa reveló que el secuestro fue coordinado por la banda de Los Tiras. Además, en aquella época, algunos medios informaron que Tommy Mottola, entonces presidente de Sony Music, llegó a contratar a especialistas estadounidenses en secuestros para negociar con los presuntos captores de Laura Zapata y Ernestina Sodi.

Sin embargo, Zapata ha aclarado que la única persona que envió un sobre con dinero fue la productora de TV Azteca, Elisa Salinas.

Durante el cautiverio, Laura Zapata fue liberada antes que su media hermana por una poderosa razón.

“ Y este era un negocio familiar, era el papá, los hijos, no sé qué, pero había dos de la banda de los Petriciolet, los que mataron al niño Martí, entonces dicen: ‘Vamos a liberar a una de ustedes y Ernestina dice: ‘Pues sí, pues Laura’, yo dije: ‘Yo puedo pedir dinero a ya sabes: El Gordo y La Flaca, a mi amigo Herrerías… a Pati Chapoy y, déjame decirte una cosa, la única que mandó un sobre con dinero fue Elisa Salinas, después se le regresó”, relató.

Luego de su liberación, la dinámica familiar de Thalia se fracturó irremediablemente. Laura y Ernestina no solo enfrentaron el dolor del secuestro, sino que con el tiempo tomaron rumbos diferentes en su búsqueda por olvidar ese capítulo tan trágico de sus vidas.

“Libranos del mal”, el libro de Ernestina Sodi sobre su secuestro

El secuestro que vivieron Laura Zapata y Ernestina Sodi hace 22 años transformó radicalmente no solo sus vidas, sino también la relación entre ellas. La ruptura ocurrió cuando Ernestina y sus hermanas sugirieron que Laura podría haber sido una de las autoras intelectuales del secuestro, implicando que había coludido con “Los Tiras” para planear el crimen. Como resultado, Laura decidió cortar todos los lazos familiares con las Sodi.

En 2005, tres años después del secuestro, Ernestina publicó un libro titulado Líbranos del mal. En esta obra, la mamá de Camila Sodi relata de manera detallada su experiencia durante el cautiverio que sufrió junto a su hermana, Laura Zapata.

La escritora ofrece una mirada profunda sobre el impacto emocional y psicológico del secuestro, así como sobre la fortaleza que tuvo que encontrar para superar esa etapa tan difícil. Tras la publicación del libro, los lazos entre Laura Zapata y Ernestina Sodi se debilitaron, lo que también afectó la relación de Laura con sus otras hermanas, incluida Thalia.

Al conocer el contenido del libro, Laura expresó su desconcierto y afirmó que no tenía conocimiento de lo que se mencionaba en él. Esta situación generó una serie de tensiones familiares que impactaron su dinámica familiar

“ No existe, yo terminé mi relación con todas ellas. No es un libro, es un pasquín que empezaba diciendo ‘Me siento la princesa de un cuento’, estás mal, ve a terapia y si es un cuento es un cuento de terror”, dijo la actriz en aquella época.

Laura Zapata revivió su secuestro en una obra de teatro

En 2005, el mismo año en el que Ernestina Sodi estrenó su libro Libranos del Mal, Laura Zapata también contó su historia en la obra de teatro Cautivas, proyecto escrito por el dramaturgo Víctor Hugo Rascón Banda.

Desde que la obra se anunció, desató polémica y enojo entre la familia Sodi, quienes le solicitaron a la actriz que no hiciera la obra de teatro.

“ Me prohibieron hacer la obra de teatro, a mí, Víctor Hugo, que estaba muy malo, me dijo: ‘No, Laura, hablaron unos señores y me dijeron que yo no podía hacer, ni escribir, ni poner los nombres porque si no me iban a hacer una demanda multimillonaria y en dólares, y yo Laura lo único que tengo es dinero para hacer mis quimioterapias para salir de este cáncer’”, relató.

En una entrevista, Thalia dijo en un programa de TV Azteca que la herida por el secuestro estaba aún muy fresca. Además, le solicitó a Laura que no mencionara su nombre ni el de su esposo, Tommy Mottola. Sin embargo, Laura hizo caso omiso y continuó con el libreto original.

La cantante mexicana recordó en el programa que le incomodaba que los nombres de ella y Tommy se repitieran constantemente en un caso que había sido tan doloroso para la familia.