Coahuila
Hace 1 semana
ESTIMADOS LECTORES Y LECTORAS:
Acá andamos en la feria visitando a una queridísima amiga, Rocío González Pozo, y su querida familia, que me acoge como una de su familia siempre, de esas hermanas del alma, les digo yo, que estuvo en el momento más doloroso de toda mi vida, hasta el día de hoy. Y miren que he pasado por unas, que ya les he platicado. Aquí en Aguascalientes, fue donde nació sin vida mi hijito hermoso y mi querida amiga Rocío, recuerdo, llegó con un ramo de flores, las más bellas y coloridas, para una mamá muy joven que había perdido lo más amado, a su hijito, que esperaba con todo el amor. Ella llegó como un ángel a mi casa de Colinas del Poniente, en la calle de Rio Santiago 203. Que por cierto pase por ahí y aún tiene la reja de fierro con las iniciales que le pusimos de la familia (A PM). Ya se imaginarán todos los recuerdos que afloraron al pasar por esa casa, donde fue nuestro hogar durante tres años. Desde el 26 de abril de 1991 no había vuelto a pisar la feria, ya que al siguiente día, 27 de abril, fue cuando mi hijito nació, y de inmediato se fue con Dios, duró muy pocos meses en mi vientre, pero aún puedo recordar ese vacío tan horrible en mis entrañas, cuando sale de mí con gran fuerza al mundo, desde la cama de la habitación de la clínica de unas monjitas. Al día siguiente, 28 de abril, pasÓ un sacerdote y le dije que sI podía bautizar a mi hijito, con el alma hecha añicos, sin poder creer lo que había sucedido. Le puse Abrahamcito, así lo bauticé. Estaba mi santa mamá hermosa conmigo, acababa de llegar de viajar toda la noche en autobús y aún recuerdo que, al abrir mis ojos, ella estaba ahí con su semblante triste, con sus rodillas laceradas porque se había caído al bajar del autobús, le dije a la enfermera que por favor la curara. Momentos tan dolorosos que pasamos juntas, ella siempre ha estado para mí y para mis hijas, bueno, para todos en mi familia, pero mi querida mamá ha sido uno de mis pilares, 89 años cumplirá, bendito Dios lo permita, aún con una fortaleza casi inquebrantable por tantas cosas que hemos pasado juntas, mamita hermosa, gracias, te amo.
Y bueno, les comentaba que hace 34 años no venía a la feria, pues no era grato para mí, ya que estando en la feria con unos queridos compadres de San Luis, me sentí muy mal y tuve que regresar a casa a reposar, y bueno, al otro día, un 27 de abril, mi vida cambió para siempre.
Ahora que anduve por las calles, todo adornado, con esos colores tan llamativos y hermosos, por la calle de Carranza, estaba un cielo tejido de colores, me encantó, había dos como árboles, también recubiertos de ese tejido tan lindo. Gran trabajo realizado por mujeres de una comunidad, que no recuerdo el nombre, pero me imagino que fueron meses para preparar ese bello cielo tejido de colores. Así también el quiosco de la plaza San Marcos, es una bella plaza, donde está una iglesia, muy hermosa. Que por cierto estaba en lo alto la bandera azul y amarillo, representando a nuestro entrañable Papa Francisco, casi se va el día de la resurrección de Nuestro Señor Jesucristo, tal vez su alma ya estaba preparada para ese día y sólo su corazón tardó unas horas más en dejar de latir, ha sido una perdida muy grande, ya que fue un papa muy querido también, con una apertura de pensamientos, de grandes conocimientos de la vida del ser más vulnerable en todos los sentidos. Sin duda con una gran alma. Con una vida muy interesante. Nos miró a los que conformamos la iglesia con otros ojos, con misericordia, el ser humano vulnerable y lleno de errores, propios de nuestro ser. Todos estamos dentro del mundo del Señor, decía con otras palabras, todos tienen cabida en el reino de Dios, absolutamente. Él acerco a más católicos a la Iglesia que ya no estaban dentro, porque no se les permitía, o no eran bien vistos, por sus formas de vida que no eran del agrado de otros miembros de la Iglesia Católica.
Ahora todos estamos dentro, pues los divorciados, tampoco éramos bien vistos, como si tuviéramos lepra, o algo parecido, y aun hoy en día algunas miradas siguen viéndonos como bichos raros, finalmente yo preferí vivir una vida digna, una vida en armonía, en paz, en tranquilidad, en amor a mí misma y a mis tres hijas. Es de valientes llegar a esa decisión, por el motivo que sea. Es mejor vivir una verdad, que una mentira, mil veces.
Cuántas personas viven un matrimonio de mentiras, aguantando todo tipo de violencia, de control, de infidelidades. En fin. Ya me fui por otro tema. Pero bueno, la verdad es que Dios se llevó a un gran ser humano sin duda alguna, muy amado por todos los católicos, y no dudo que por otros seres de otras religiones.
Nos dejó un legado muy bello, ¿ahora quién llegará en su lugar? Pues la vara quedó muy alta. Dios permita que sea alguien de esta altura de nuestro querido, respetado y admirado Papa Francisco.
Siempre es triste despedirse de los seres amados, pero más aún cuando han dado su vida por los demás, dejando un bello legado. Un ejemplo de vida, digna. Su rostro era tan tierno, su voz con un tono que te ayudaba e inspiraba, sólo de escucharlo. Gracias Papa Francisco, te llevaremos siempre en nuestra alma, como un grande emisario de Dios. Luz en su camino a Dios.
Una abrazo fraterno y felices pascuas a todos, que hayan pasado la mejor Semana Santa, y la mejor semana de pascua con los seres queridos, que el ejemplo del papa, nos sea de gran ejemplo en nuestras vidas. Su amiga y terapeuta, Verónica. Diosito por delante.
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