Saltillo|Monclova|Piedras Negras|Acuña|Carbonífera|TorreónEdición Impresa
Dan a Zaldívar control de la Suprema Corte; maniatan al Poder Judicial Desquician obras tráfico por la Sal-Mty; colapsadas ambas vías Se apuntan 10 hacia la Fiscalía de Coahuila; recibe Congreso perfiles ¡Reconocen lo mejor del país!; Premio Nacional de Deportes 2024 Incauta CBP $42 millones en cocaína

Zócalo

|

     

Opinión

|

Información

< Opinión

 

Nacional

El nervioso

Por Carlos Loret de Mola

Hace 2 meses

Desde hace 26 días al Presidente se le ha visto nervioso. Tiene la desventaja de que tantas horas de mañanera permiten ver su estado de ánimo, y desde que detuvieron a Ismael “El Mayo” Zambada, a Andrés Manuel López Obrador se le nota inquieto: sus declaraciones sobre el asunto son contradictorias, no ha sido capaz de informar qué pasó, pide explicaciones al Gobierno de Estados Unidos, pero este no se las da, y llegó al extremo de callar a su secretaria de Seguridad Pública -futura secretaria de Gobernación-, Rosa Icela Rodríguez, cuando ella se disponía a compartir más datos.

Está claro que el caso pone nervioso al Presidente. Está claro que lo que pueda decir en las cortes americanas “El Mayo” Zambada lo tiene así.

Y ya tuvo su primera “probadita”: “El Mayo” descolocó al Gobernador de Sinaloa, el morenista Rubén Rocha Moya, y tuvieron que entrar al rescate el Presidente saliente y la Presidenta entrante para apagar un fuego que sigue encendido.

¿Qué seguirá brotando del testimonio de Ismael “El Mayo” Zambada? ¿Confesará reuniones con algún dirigente morenista en Colima? ¿Platicará que le presentaron en Mazatlán a un alto funcionario? ¿Que fue a una comida en Culiacán con algún otro poderoso del Gabinete? ¿Salpicará al círculo más íntimo? ¿Relatará entregas de dinero a campañas?

El problema para el Presidente es que si “El Mayo” enfoca sus baterías contra él y su movimiento, va a tener poca defensa. La narrativa lo hunde. Primero, porque en el Gobierno sabían dónde estaba “El Mayo” y nunca lo detuvieron. Segundo, porque establecieron con el capo una alianza política y de gobierno.

Tercero, porque el Presidente lleva todo el sexenio usando declaraciones de narcotraficantes que hundieron a García Luna (ni modo que ahora diga que cómo creer el testimonio de un delincuente).

Cuarto, porque explícitamente AMLO ha dicho que su Gobierno no busca detener a los grandes capos de la droga.

Quinto, porque en las mañaneras se refiere a los capos de la droga con el respeto que sólo dispensa a sus aliados.

Sexto, porque en la prensa internacional ha cundido la versión de que su movimiento político ha sido financiado con dinero de la droga.

Y séptimo, porque todo esto se enmarca en la política de “abrazos no balazos” que cierra el círculo que da credibilidad a la existencia de un pacto crimen-Gobierno.

El Presidente ha tratado de esconder el galimatías en que lo puso la detención de “El Mayo” echando mano de un discurso setentero antiyanqui. Si Estados Unidos realizó un operativo gubernamental antinarco en suelo mexicano sin la autorización del Gobierno (que sería una grave violación a la soberanía), México no ha presentado ninguna prueba.

En cambio, lo palpable es que el Gobierno de López Obrador ha cerrado las puertas de la cooperación a las agencias de inteligencia de Estados Unidos mientras se las ha abierto a los cárteles.

En la mañanera se critica ferozmente a estas agencias, pero se trata con respeto a los capos.

Y esta ecuación es inaceptable para Estados Unidos, porque se ha vuelto electoralmente explosivo el tema del fentanilo que llega de México y mata cada año a 100 mil jóvenes estadunidenses. Lo demás son consecuencias.

 

Notas Relacionadas

Dan a Zaldívar control de la Suprema Corte; maniatan al Poder Judicial

Hace 42 minutos

Se apuntan 10 hacia la Fiscalía de Coahuila; recibe Congreso perfiles

Hace 48 minutos

Las energías limpias de Sheinbaum

Hace 59 minutos

Más sobre esta sección Más en Nacional

Hace 59 minutos

Las energías limpias de Sheinbaum

Hace 59 minutos

Inversión en México sólo crecerá 1%

Hace 1 hora

La lección del espejo