Seguridad
Por
Agencia Reforma
Publicado el jueves, 13 de febrero del 2025 a las 07:58
Ciudad de México.- Mucho antes de encabezar una de las facciones que protagonizan la pugna interna del Cártel de Sinaloa, Iván Archivaldo Guzmán Salazar, alias “El Chapito”, tuvo un roce con la justicia en Zapopan.
Todo comenzó a las 2:00 horas del 13 de febrero de 2005 -hace 20 años- en una brecha que conduce a Nextipac.
Los ocupantes de una Jeep Liberty roja aceleraron la marcha al ver de cerca una patrulla, pero fueron perseguidos.
Del vehículo saltó un hombre, quien presuntamente iba secuestrado. Otros cinco sujetos fueron detenidos tras caer con la camioneta a una zanja.
De acuerdo con registros periodísticos, uno de los sospechosos confesó que un hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán los había contratado para asesinar a tres personas.
Mientras discutían, el celular de uno de los sicarios sonó.
El comandante de la Policía de Zapopan que estaba a cargo tomó el teléfono y se hizo pasar por uno de los pistoleros. Después de algunos minutos, acordó con su interlocutor verse en una gasolinera para recibir el pago por la ejecución.
Una camioneta BMW tinta, con placas JDL3597, llegó a la estación de servicio ubicada en Camino a Tesistán y Prolongación Ángel Leaño, donde la Policía los esperaba.
Los oficiales detuvieron a Iván Archivaldo, quien se identificó en ese momento como Alejandro Cárdenas Salazar.
Los documentos de la camioneta sirvieron para establecer el nombre de “El Chapito”, ya que estaba registrada a nombre de su madre, María Olga Salazar Hernández, entonces esposa de “El Chapo” Guzmán.
Junto con Iván Archivaldo fueron capturados también Alfredo Gómez Díaz y Javier González Reynoso. El primero de ellos portaba una pistola calibre .45.
Horas después del arresto, policías zapopanos hallaron los cadáveres de dos hombres con impactos de bala en la brecha Plan de la Noria, al cruce con Carretera a Nextipac, cerca del lugar donde fueron detenidos los tripulantes de la camioneta Liberty.
Una de las víctimas era un ganadero originario de Pericos, Sinaloa; la otra tenía un restaurante de mariscos en Chihuahua.
Luego de confirmarse la identidad de “El Chapito”, la PGR atrajo el caso.
Escoltados por un convoy de militares y agentes federales, Iván Archivaldo y sus dos acompañantes fueron trasladados a la Capital del País, donde quedaron a disposición de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada.
“El Chapito” fue señalado como supuesto autor intelectual de la doble ejecución, pero también fue acusado de lavado de dinero, delincuencia organizada, secuestro y tentativa de homicidio, según las versiones de autoridades de la época.
Aunque fue arraigado por varios periodos y estuvo bajo investigación federal, los cargos se fueron diluyendo con el paso del tiempo.
El 11 de abril de 2008, el hijo de “El Chapo” Guzmán fue liberado.
Iván Archivaldo es identificado actualmente como uno de los líderes de “Los Chapitos”, facción del Cártel de Sinaloa que sostiene una violenta disputa con “Los Mayos”, grupo formado por gente leal a Ismael “El Mayo” Zambada.
“El Chapito” es buscado en Estados Unidos por conspiración para distribuir drogas y fabricación de fentanilo.
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