Monclova, Coah.- “La atracción por el box no se acabó con el retiro, más bien, descubrí otra forma de mantenerme activo, enseñando a los chavos lo que yo aprendí a lo largo de 15 años como boxeador profesional”, cuenta Efraín “Yin” Barboza.

A 8 años aproximadamente de su último combate, la relación entre el púgil fronterense y el rudo deporte del boxeo sigue en boga.

Luego de contabilizar 37 victorias y una derrota como profesional, de haber ostentando el campeonato estatal de peso Súper Welter con 2 exitosas defensas, y sobre todo, de ganarse el reconocimiento y la admiración de la afición local, decir adiós al boxeo fue una decisión difícil para “El Yin”, quien empezó a escribir su historia desde muy chico.

“Juan “La Marsopa” Castro me debutó a los 15 años, y a los 36 me retiré. Estaba muy “chavalo” cuando debuté ganando en Barroterán, pero seguí entrenando y después llegué a ser campeón estatal”, dice Efraín.

“Gané 37 peleas y perdí cuando ya iba de salida. Pero cuando tenía como unos 18 años era el mejor de Coahuila en mi división: Absolutamente nadie me pudo ganar en esa época”, recuerda con orgullo el boxeador, ahora entrenador en el gimnasio Pumma de Monclova.

En el baúl de los recuerdos, “El Yin” Barboza guarda una serie de peleas que él considera memorable, frente al “Bambino” Alcalá de Acuña, Coahuila.

En la primera pelea contra “El Bambino”, el oriundo de Frontera cayó por decisión, sin embargo, a Efraín Barboza le llegó la revancha y tras una intensa preparación cobró venganza con un certero nocaut en el quinto round sobre su rival.

Otro de los grandes rivales de Efraín fue “La Roca” Montemayor, a quien se enfrentó en su pelea de despedida hace 8 años. “Fue una pelea bastante dura, de las que guardo mejores recuerdos”, agregó.

DE PUPILO A MANEJADOR

Tras colgar los guantes, por invitación de Fernando Muñoz, Efraín Barboza decidió reintegrarse a la actividad boxística pero ahora como entrenador; lugar desde el que tendría la oportunidad de transmitir lo que le enseñaron esos años en el gimnasio, sus noches de gloria sobre el ring y también sus derrotas.

“No tenía pensado dedicarme a esto después de haberme retirado, pero Fernando Muñoz me comentó iba a poner un gimnasio y me invitó a entrenar con él”, comenta.

“Me da mucho gusto cuando llegan los “chavitos” y preguntan, ¿Usted es el mánager?, o cuando llega un padre de familia y me dice, aquí te traigo a mi chavo para que lo entrenes, se siente una gran satisfacción”, agregó.

VIVEN MEJORES TIEMPOS

Para Efraín Barboza, los boxeadores locales viven mejores tiempos dado el apoyo del que gozan actualmente, y prueba de ésto es la carrera del campeón nacional Josaphat Pérez, quien en abril próximo contenderá por el título mundial del venezolano Jorge Linares.

“Los chavos de ahorita tienen el apoyo que no tuvimos los de antes. Ahora tienen una ventaja muy grande, y un ejemplo es Josaphat “El Leoncito” Pérez. Aquí en el gimnasio hay varios boxeadores tremendos, que tienen nivel y que yo espero que lleguen lejos”, comenta.

“Antes era muy difícil que un boxeador saliera de Monclova, pero ahorita los estamos llevando a Torreón, Monterrey, Laredo”, agregó.

HABRÁ SEGUNDA PARTE

La historia de Efraín “Yin” Barboza tendrá una segunda parte, ya que el hijo del púgil fronterense ha mostrado cualidades que lo perfilan como un ídolo en el futuro, según comentó el ídolo.