Gómez Palacio.- En el Hospital General de Gómez Palacio, Durango, se presentó un caso de presunta negligencia médica cuando a Alejandro Hernández le fue extraído un riñón bajo la sospecha de cáncer. Posteriormente, se determinó que la extracción no era necesaria, ya que padecía una enfermedad tratable. La familia solicitó la devolución del órgano y éste les fue entregado en un bote de yogurth. Tras la cirugía, el paciente sufrió complicaciones de salud y permanece internado en estado inconsciente en la Clínica 46 del IMSS, presentando sangrados en nariz y boca.

Este incidente se suma a otras denuncias sobre la falta de insumos médicos en el hospital. Se reportó que el personal reemplazó instrumentos médicos con objetos improvisados, como frascos de café y vasos de unicel, debido a la carencia de materiales adecuados. El gobernador de Durango, Esteban Villegas, reconoció estas deficiencias y se comprometió a solucionar los problemas en los hospitales de la región, ofreciendo disculpas a los afectados y asegurando que se realizarán los cambios necesarios para mejorar el servicio y la atención en las clínicas.

Con información de N+.