Monterrey, NL.- Como parte de las acciones para hacer justicia y preservar la memoria de las víctimas que fallecieron en el atentado al Casino Royale, hace 13 años, ayer fue develado un memorial en la zona donde se ubicaba la casa de apuestas.

Junto con familiares de las víctimas, el Municipio de Monterrey diseñó el memorial de siete metros de alto, que lleva la frase:

“Que su sangre derramada y las lágrimas de sus familias les persiga siempre y no encuentren paz donde quiera que estén”.

Al centro, el monumento tiene un corazón rojo y los números “52+2”, en referencia al número de personas que fueron asesinadas, incluyendo a dos mujeres embarazadas.

La Administración emecista aseguró que sostuvieron reuniones con los familiares de las víctimas para asegurarse que el proyecto representara sus sentimientos y fuera digno para las personas fallecidas el 25 de agosto del 2011 durante un ataque de un grupo del crimen organizado.

Olga Susana Méndez, presidenta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, dijo que el memorial se construyó por el Municipio regio en respuesta a la recomendación 103/2012 que el organismo emitió.

“En este día de reflexión es fundamental reconocer la importancia del memorial que se presentará, este espacio es un espacio de recuerdo, de dignidad”, señaló.

Los familiares de las víctimas solicitaron la remoción del antiguo memorial colocado en el camellón de la Avenida San Jerónimo, lo que se realizó desde el 25 de agosto del año pasado.

En representación del Gobierno de Monterrey estuvo Francisco Donaciano Bahena Sampogna, Encargado del Despacho de la Presidencia Municipal.

“Son duras las palabras que están plasmadas en el monumento que hoy entregamos a ustedes, familias, como homenaje a su dolor, como reconocimiento de lo que ocurrió”, dijo el funcionario regio.

“En la dureza de esas palabras va también el enérgico reclamo que ustedes, con justicia, exigen de sus autoridades: que esto no vuelva nunca a ocurrir y que los nombres de los fallecidos nunca sean olvidados”.