Saltillo
Por Carlos Rodríguez
Publicado el domingo, 3 de noviembre del 2024 a las 08:00
Saltillom Coah.- “Aquí asustan porque era un panteón”, es la leyenda urbana más trillada que se dice en los planteles educativos entre los estudiantes de Saltillo, pero la realidad es que solamente hay una en donde efectivamente fue un camposanto, la escuela Centenario, que se ubica en el cruce de las calles Benito Juárez y Abasolo.
“ Hay quien dice que el panteón principal que estaba de Matamoros hacia Abasolo llegaba hasta la escuela Centenario. El panteón de los españoles en la esquina entre Matamoros, Abasolo, De la Fuente y Juárez estuvo en funciones de 1833 a 1890”, comentó el historiador Carlos Recio.
Durante décadas se ha creído que la escuela Coahuila fue un panteón, sin embargo, los estudios más precisos del historiador autor del libro Espacios Geográficos, Urbanos Públicos y de Tránsito de Saltillo, constatan que no.
Pues tras la promulgación del decreto de que los cuerpos no podrían ya ser enterrados en los templos, el panteón de la Villa de Santiago fue en el extremo oriente. Por ello, toda una manzana que incluye negocios, casas habitación y la mencionada escuela está construida sobre restos humanos.
Los enterraban en las iglesias
Alrededor de Catedral y adentro del templo enterraban a los españoles, desde 1577 hasta 1833. Mientras que del lado Tlaxcalteca, el cementerio estaba entre Allende, Padre Flores Abbot y Ocampo, allí se ubicaron los primeros cementerios de Saltillo.
“ Pero también los tlaxcaltecas y los sacerdotes franciscanos eran sepultados al interior, al igual que los españoles más distinguidos, los tlaxcaltecas en San Esteban y en Catedral los españoles”.
Fue hasta que hubo la epidemia del cólera morbus que se decidió que los cuerpos debían ser sepultados lejos de la comunidad.
Entonces el terreno que hoy ocupa la parte del Lago y la Biblioteca de la Alameda sirvió como cementerio.
El panteón de los americanos
Los americanos invadieron Saltillo en 1946 y se quedaron hasta agosto del 48, y como muchos de ellos no eran católicos los empezaron a enterrar en las huertas. Obtienen permiso de las autoridades locales de hacer un pequeño cementerio en donde posteriormente fue el Cine Royal.
No estuvo en la escuela Coahuila, el panteón de los americanos que fallecieron durante la invasión estadounidense estuvo más hacia el norte, concretamente donde ahorita es una pequeña plaza entre la Sociedad Mutualista de Zarco de Artesanos y negocios de la zona.
“ Hay una narración de un americano que dice que para el panteón de los saltillenses, así como el de los norteamericanos, había que pasar un arroyo”, detalla el historiador.
Existen daguerrotipos, que es una especie de fotografía primitiva en donde se plasmó la tumba de Henry Clayne Júnior, tras fallecer en la Batalla de la Angostura, y como era hijo de un destacado personaje se pidió que se exhumara.
“ Hay una petición del Gobierno de los Estados Unidos para repatriar los restos hacia 1910, pero no hay mucho seguimiento en el archivo, posiblemente sí hayan sido repatriados algunos”, narró Carlos Recio.
Panteón de San Esteban y de Santiago
El panteón que sigue en funcionamiento más antiguo es el de San Esteban, que está en la calle Fernando Proal en la colonia Panteones, allí se enterraba a los tlaxcaltecas desde 1870.
“ Hacia 1870 los tlaxcaltecas deciden crear el Panteón de San Esteban, que todavía existe, un poco a un lado de las vías del tren, rumbo al hospital”.
Un par de décadas después, los descendientes de españoles crearon el que fue el panteón para la gente con más recursos económicos de la época, que se ubicó muy cerca del de San Esteban, en la actual calzada Madero.
“ Los descendientes de españoles, la gente más adinerada crea hacia 1890 el Panteón de Santiago, justo a un lado del de San Esteban, pero allí es donde entierran a la gente más rica, con grandes monumentos, mausoleos”.
Ya en 1946 se habilitó un nuevo camposanto, pues la demanda de espacios para una ciudad que crecía era mayor, se hizo en la antigua carretera a Arteaga, el Panteón del Santo Cristo que sigue abierto, aunque los terrenos prácticamente ya están ocupados en su totalidad.
Primeros cementerios…
Alrededor de Catedral y adentro sepultaban a los españoles, desde 1577 hasta 1833.
Del lado Tlaxcalteca, el cementerio estaba entre Allende, Padre Flores Abbot y Ocampo.
El terreno que hoy ocupa la parte del Lago y la Biblioteca de la Alameda sirvió como cementerio.
San Esteban, el panteón más antiguo que sigue en funcionamiento.
La gente más adinerada crea hacia 1890 el Panteón de Santiago, justo a un lado del de San Esteban.
Hasta 1946, y por la demanda de espacios, se creó el Panteón Santo Cristo.
Habría restos dondequiera
Así que la próxima vez que te digan “Aquí asustan porque fue un panteón”, ya sabes que es una leyenda sin fundamentos, sin embargo, el historiador destaca que prácticamente en cualquier lugar del primer cuadro de la ciudad pudo haber moradas eternas, pues en los siglos pasados muchos enterraban a sus seres queridos en las huertas.
“ También hay que ver que en la sociedad antigua los saltillenses enterraban a sus difuntos en las huertas. No era muy común pero sí”, concluye.
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