La armadora dejó claro que no está llevando a cabo ningún proceso de reclutamiento masivo, lo que encendió las alarmas sobre una posible estrategia de reclutamiento forzado por parte del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), una práctica documentada en diversas partes del país.
El analista y experto en seguridad David Saucedo advirtió que este tipo de engaños coinciden con el modus operandi del CJNG, que en varias ocasiones ha utilizado falsas ofertas de empleo para atraer a jóvenes, trasladarlos a otros puntos del país y forzarlos a unirse a sus filas.
Según Saucedo, el caso de Celaya es especialmente preocupante, ya que la ciudad se encuentra en medio de la disputa territorial entre el CJNG y el Cártel de Santa Rosa de Lima (CSRL), dos de las organizaciones criminales más violentas del estado de Guanajuato.
“ El caso de Celaya es emblemático porque justamente hay presencia del Cártel de Jalisco Nueva Generación en ese municipio, y el cártel dominante es el de Santa Rosa de Lima. No ha podido Jalisco apoderarse de esa ciudad y se encuentran en disputa ambos grupos criminales”.
“ Tiene sentido que el CJNG esté tratando de reclutar jóvenes en Celaya para inhibir y ganarle el reclutamiento al CSRL. Este Cártel de Santa Rosa no recurre al reclutamiento forzado, sino que hacen ofrecimientos económicos y hacen uso de su red de contactos y familiares, su red de apoyos que brindan a barrios marginados y comunidades rurales”, explicó el analista.
Detalló que esta clase de prácticas se utilizan difundiendo folletos, pegando carteles o a través de grupos de WhatsApp, especialmente en colonias urbano-marginadas donde los ciudadanos suelen estar en búsqueda de oportunidades de empleo y pueden caer con mayor facilidad en estos engaños, donde les ofrecen altos salarios y buenas prestaciones. En muchas ocasiones, cuando la información ha sido desmentida, ya es muy tarde para ellos.
“ Es el mismo modus operandi. Se hace una convocatoria con anuncios en medios, se cita a jóvenes mayores de 18 años para que se concentren en una terminal de autobuses y de ahí se los llevan. Ese es precisamente el modus que ha estado implementando el Cártel Jalisco en el esquema de reclutamiento forzado”.
“ Hay variantes, ya que en ocasiones se solicita que sean jóvenes que tengan alguna experiencia en el ramo de la seguridad, y también se pide expresamente que sean expolicías o exmilitares para incorporarlos como monitoristas, vigilantes o veladores, pero al final, de acuerdo con los testimonios, se trata de anuncios falsos”, detalló David Saucedo.
Para el experto en materia de seguridad, el caso de Teuchitlán, Jalisco, reveló los mecanismos de reclutamiento a través de falsas ofertas laborales por parte de los cárteles. Por tal motivo, señaló que sería prudente una reforma en el Código Penal —local o nacional— para que este tipo de conducta se tipifique como un delito y se sancione.