Saltillo|Monclova|Piedras Negras|Acuña|Carbonífera|TorreónEdición Impresa
Tele Zócalo Matutino / 02 de enero de 2024 Arrancan Manolo y Javier con 100 mdp para Saltillo; invertirán en transporte público ‘Diluye la Federación el potencial industrial’; Obstaculiza el nearshoring: Canacintra Requiere Stellantis 3 mil trabajadores; alista nueva planta en Saltillo Descarta FIFA a Monterrey; termina el sueño

Zócalo

|

Arte

|

Información

< Arte

| Foto: Zócalo | Agencia  

Arte

Cierra este año con los mejores libros del 2024; conoce la lista

  Por Christian García

Publicado el lunes, 30 de diciembre del 2024 a las 04:05


Repasa algunos de los títulos publicados más relevantes

Saltillo, Coah.-  El año termina y se cierra como un libro, pero entre las 365 días que duró dejó numerosos títulos que, como páginas, guardan historias para todos los gustos. Entre obras de narrativa, en el que la novela sigue reinando en los estantes de novedades, aparecen cada vez con más fuerza, libros de cuentos y, sobre todo, ensayos publicados principalmente por editoriales independientes o universitarias, aunque también los grandes consorcios voltean a ver a la no ficción, no por nada La Llamada, crónica de la periodista argentina Leila Guerriero, ha sido nombrado como el libro del año en diversas listas.

El 2024 es también un año que renovó el interés en géneros como el western, para prueba está la novela más reciente del italiano Alessandro Baricco, Abel. Pero antes de este volumen, apareció Matamonstruos (Impedimenta), volumen que cierra la trilogía que el escritor español Jon Bilbao inició en 2020 con Basilisco, siguió en 2022 con Araña, y que en este libro cierra una historia que sabe a arena de desierto, a pólvora recién quemada en el cañón de un revolver y a la mitología del Viejo Oeste, mismos que la editorial Valdemar ha puesto al alcance de todos con su colección Frontera, de la cual este año leí El Rapto de Marah, de Dale Van Every, y Pequeño Gran Hombre, de Thomas Berger, dos clásicos del género.

La trilogía de Bilbao, se divide en dos líneas: la primera de ellas es la de John Dumbar, legendario pistolero del lejano oeste quien lucha entre quién es, pues dentro de si habita otra personalidad, la del Basilisco, un feroz y cruel personaje que enfrenta igual a bandoleros que a indios, en una serie de historias cortas conectadas por un arco de crecimiento. La otra es la historia de Jon Bilbao, personaje que aunque toma el nombre de su autor, no es él mismo, sino que ha adquirido una vida propia y, conforme cruza su existencia con sus crisis y felicidades, nutre la historia de Dumbar, en un enramado de historias que permiten que los libros puedan leerse como una novela o una serie de relatos cortos.

Y es gracias a ese aliento vital que Bilbao les otorga, que los personajes se sienten vivos en los tres volúmenes de la historia que, poco a poco, adquiere una atmósfera metafísica a través de las alegorías que llenan sus páginas y que, a fuerza de ellas, cimienta una mitología propia que dialoga por medio de referencias con los grandes hitos del género, tanto literarios como cinematográficos.

En Latinoamérica los códigos de la novela del oeste también dieron sus frutos, especialmente en Aguafuerte (Planeta), del chileno Simón Soto. Historia de fronteras que aborda la Guerra del Pacífico en el que se involucran las tensiones políticas de países como Perú y Bolivia.

Es en ese contexto, sucedido en 1879, en el que Soto sitúa a Manuel Romero, el personaje principal del libro, y quien busca el aguafuerte, una mítica bebida que ofrece beneficios divinos y sicodélicos. A lo largo de su historia, será testigo de la brutalidad de la guerra.

Definido como un “western gótico”, Aguafuerte presenta una interesante forma de atrapar la estructura de las historias de fronteras y trasladaras al ámbito latinoamericano. Además, se puede sentir en su prosa densa, el resabio de la influencia de autores como el recién fallecido Cormac McCarthy y su Meridiano de Sangre. Este título, por otra parte, dialoga con el filme Los Colonos, de Felipe Gálvez, otro western chileno que sucede en el país del sur.

En 2020 el también chileno Benjamín Labatut sorprendió al mundo con su libro de relatos Un Verdor Terrible (Anagrama) que conjugaba ciencia y ficción en una serie de textos híbridos que se movían entre la narrativa y el ensayo. Este año regresó con su novela Maniac, publicada también por la editorial española, en la que escritor vuelve a una novela enloquecedora, como su nombre lo índica, que versa sobre la Inteligencia Artificial, a través de la figura de John von Neuman, informático del siglo 20 que, a la postre, se convertiría en el padre de la IA.

En este libro, dividido en tres historias, Labatut recorre el pasado, el presente y el futuro de la ciencia y su impacto en la humanidad.

Proveniente también de América del Sur, la escritora Mónica Ojeda presentó este año un alucinante viaje sicodélico con su novela Chamanes Eléctricos en la Fiesta del Sol (Penguin Random). En este libro, la autora uruguaya, cuenta la historia de dos amigas, Noa y Nicole, quienes van a un festival de música para huir de sus problemas y de sí mismas, sin saber que será ahí en donde más profundo se encontrarán con lo que guardan sus conciencias.

Por ello, la autora –una de las narradoras latinoamericanas mejor ponderadas de la actual generación– echa mano de una prosa potente y enrarecida para narrar un viaje iniciático en el que lo fantástico adquiere tintes terrenos pero de una forma caótica y profunda, que crece poco a poco y finaliza en una erupción sinéstesica que muestra por qué Ojeda es una de las plumas más interesantes de los géneros fantásticos en la actualidad.

El diálogo interno

La no ficción ha tenido, también, un relevante auge en las novedades. En el caso de México, destaca Suerte de Principiante (Gris Tormenta) del escritor coahuilense Julián Herbert, quien en este libro repasa, por medio de 11 ensayos, su particular forma de enfrentar la escritura.

Publicado en la colección Paisaje Interior, junto a otros libros igual de interesantes como El Lenguaje del Poema de Mario Montalbetti y Última Carta a un Lector de Gerard Murnane, Suerte de Principiante se convierte en una disección de los motivos del por qué escribir. Como dice Herbert “¿Es la literatura una predestinación, una cierta condición de la conciencia que nos impulsa a algunos a adquirir un oficio difícil y no del todo satisfactorio, de manera obstinada, poniendo a veces en riesgo la salud o el reconocimiento social o la estabilidad emocional o los medios de subsistencia? Hay quien opina que la vocación literaria no existe y que hablar de ella es una narcisista pérdida de tiempo. Para mí es un enigma que me obsesiona desde la adolescencia, y es la causa principal de que elabore discursos como este”

Otro libro que disfruté bastante es Ñu (Anagrama), del filósofo Pau Luque, un divertidísimo ensayo en el que el español se vuelca sobe recuerdos de su infancia, anécdotas de su vida diaria y diálogos con algunos importantes amigos suyos para encontrar soluciones a problemas de la vida diaria.

Así, el ganador del Premio Anagrama de Ensayo por su libro Las Cosas Cómo Son y Otras Fantasías, ofrece un panorama en apariencia lleno de absurdos que, poco a poco, construyen un mapa de ideas que conforman una realidad huidiza pero existente en el que las soluciones más simples se complejizan por necesidad propia.

Anagrama publicó, también, Ensayo General, de Milena Busquets. Otro libro fragmentario en el que la escritora española invita al lector a sumergirse en su experiencia de vida sobre la muerte y el amor, la vida engarzada entre las páginas de los libros que la formaron como autora, pero también como persona.
Un título sencillo en apariencia que guarda bajo los relatos personales, una forma única de ver el mundo o, mejor dicho, los mundos que somos: la infancia y la madurez, ser hija y a la vez ser madre, ser lectora y escritora van de la mano, parece decir Busquets en este delicioso libro.

Otro título de la editorial española que es digno de mencionarse es Un Puñado de Flechas, de la escritora argentina María Gainza. Ensayo en el que la también periodista explora el impacto del arte en la vida de cada uno, de todos aquellos que han sido atravesados por una obra de arte lanzada directa al corazón.

Por las páginas de Un Puñado de Flechas desfilan el cineasta Francis Ford Coppola, el pintor Cézanne, y el escritor Walden Pond Thoreau. En un recorrido que resuma la fascinación del descubrimiento y la curiosidad que todo buen ensayista debe de tener.

El relato breve

El género del cuento dio este año varios títulos muy interesantes, también. Destaca, primero, el regreso a las librerías de Luis Humberto Crosthwite, autor esencial de la llamada literatura del norte, que con El Último Show del Elegante Joan (Penguin Random House) vuelve a sus personajes excéntricos y llenos de humor, con una serie de relatos que abordan el aprendizaje, ya sea de la escritura o de la vida, porque para Crosthwite ambas son parte de una misma manera.

Con un toque paródico que referencia a las películas de kung fu del siglo pasado y la mezcla con la enseñanza de la poesía, como en Poesía Zen, o con su propio Quijote que toma vida en un cantante de bar que se imagina siendo Joan Sebastian frente al mundo, el escritor tijuanense recuerda una vez más porque es uno de los nombres esenciales de la narrativa mexicana contemporánea, y cómo se puede renovar, siempre desde la seriedad de humor.

Otra pluma que volvió a la narrativa breve, fue la de Mónica Lavín quien este año publicó El Lado Salvaje (Tusquets), colección de relatos que se centran en los espacios liminales que revelan la vulnerabilidad de las personas, de sus personajes: momentos en los que el peligro respira en el cuello de una mujer alejada de toda ayuda en un manglar de Florida, o la incertidumbre de estar en un espacio desconocido.

A lo largo de los 23 cuentos que conforman el título, Lavín revela esos intersticios de sus seres creados, tanto emocionales como físicos. Pero, además, revela otra cosa: el diálogo con otros autores A final de cuentas un escritor es siempre un lector, y en este título, Lavín deja en claro que se nutre también de ellos.

A pesar de los dos títulos nombrados, el cuento sigue siendo un género que es mayormente publicado por editoriales independientes, entre estas se puede nombrar el caso de An.Alfa.Beta, sello regiomontano que publicó Mujer con Botarga, de Irasema Corpus, una colección de cuentos en los que las protagonistas enfrentan a un mundo que las minimiza de una forma bastante curiosa: apelando a sus mundos interiores. Así, los relatos de Corpus, toman un cariz absurdista y casi kafkiano a la par que se llena de un humor negro, irónico y satírico.

Más sobre esta sección Más en Arte

Hace 2 dias

Reluce presbiterio del Templo de Santa María Huiramangaro tras una década de restauración