Recién se acaba de realizar en la CDMX el Tercer Foro de Vivienda 2024, en el que el tema principal fueron las profundas desigualdades habitacionales que afectan a América Latina.

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que preside Ilan Goldfajn, estima que 45% de los hogares en la región, incluido el Caribe, no tienen acceso a una vivienda digna.

Este déficit habitacional es un reflejo directo de la pobreza y la exclusión social, y representa un desafío complejo que requiere soluciones innovadoras y colaborativas.

Se necesita mejorar la gobernanza y los marcos normativos del sector para incentivar la participación del sector privado en la producción y financiamiento de vivienda asequible.

El BID propone seis reformas para mitigar este flagelo, donde la participación del sector privado en la construcción y financiamiento de vivienda es determinante.

También se plantea diversificar los esquemas de subsidios, creando apoyos mucho más accesibles y adecuados a las necesidades de la población vulnerable.

Asimismo, diseñar productos financieros innovadores que faciliten el acceso a la vivienda para los estratos más desfavorecidos, como otra de las reformas clave.

Además, promover la inteligencia de negocio, colaborando con institutos nacionales de estadística para una mejor gestión del déficit habitacional.

La innovación en sistemas de construcción y materiales es crucial para reducir costos y adaptarse al cambio climático mediante nuevas tecnologías y materiales.

Por último, se destaca la necesidad de mejorar la divulgación de conocimiento, fortaleciendo la comunicación y colaboración entre los actores clave del sector vivienda.

Estas reformas no son meras propuestas teóricas: ya se están realizando estudios en varios países de la región para identificar debilidades en la cadena de valor del sector y definir medidas correctivas.

AYER LE COMENTABA sobre el impacto del crimen organizado en las empresas. Un brutal de botón de muestra es lo que está pasando en Tamaulipas, donde ayer ejecutaron a Julio Almanza, presidente de la Federación de Cámaras de Comercio de ese estado y vicepresidente de la Concanaco. El 24 de julio, Femsa había anunciado el cierre de 191 tiendas de Oxxo y siete gasolinerías por la extrema violencia que se vive en Nuevo Laredo. Cinco días después, directivos de la empresa dirigida por José Antonio Fernández se reunieron con autoridades estatales para discutir medidas de seguridad, pero mientras tanto, las operaciones seguirán suspendidas en tanto se tengan condiciones para garantizar las actividades de sus colaboradores y clientes.

LA SECRETARÍA DE Turismo, a cargo de Miguel Torruco, presentó números correspondientes al primer semestre del año. El país registró 59.6 millones de pasajeros en aeropuertos, de acuerdo con esa dependencia. De estos, 29.5 millones fueron en vuelos nacionales y 30.1 millones en internacionales. Los primeros aumentaron 14.9% y los segundos 19.4% respecto a 2019. Viva Aerobus, de Roberto Alcántara, y Volaris, de Enrique Beltranena, lideraron el mercado interno con 20 millones de pasajeros, representando un incremento anual de 60.7 por ciento. Estos datos reflejan una notable recuperación y crecimiento en el sector aéreo postpandemia.

EL SAT ABRIRÁ cinco nuevas oficinas de atención a contribuyentes en comunidades sin acceso cercano, incrementando su capacidad en 10 mil atenciones mensuales y garantizando más citas disponibles. A partir del 1 de agosto de este año, los ciudadanos podrán realizar trámites en Miguel Alemán (Tamaulipas), San Quintín (Baja California), Xpujil (Campeche) y en dos ubicaciones en Nuevo León: Emprendemos (Monterrey y Santa Catarina). Esta expansión busca mejorar la cobertura de servicios conforme al Plan Maestro 2024.

EL COMERCIO INTERNACIONAL de México experimentó una notable debilidad en junio, con caídas tanto en exportaciones como en importaciones. Según el Inegi y Banco de México, las exportaciones mexicanas cayeron 5.7% anual, la mayor baja en 46 meses. Las importaciones disminuyeron 3.6%, tras dos meses de incrementos. En total, las exportaciones sumaron 48 mil 871 millones de dólares y las importaciones 49 mil 908 millones, resultando en un déficit comercial de mil 37 millones de dólares. Esta situación refleja los desafíos económicos que enfrenta el país en el contexto global actual.