Ciudad de México.- Pese a los reclamos de los partidos de Oposición, la Comisión de Prerrogativas y Partidos Políticos del Instituto Nacional Electoral (INE) aprobó la distribución de 200 diputaciones federales plurinominales.

El documento fue aprobado por unanimidad de los cinco consejeros que integran dicho organismo. Sólo el consejero Uuc-Kib Espadas fijó su posición sobre la mayoría calificada que tendrán Morena, PVEM y PT, al contar con 364 diputaciones.

Argumentó que el sistema electoral tiene graves deficiencias, pues el voto de los mexicanos no es igual al momento en que el ciudadano acude a las urnas que cuando se distribuyen las curules de representación.

El consejero dijo que aunque no le gusta la sobrerrepresentación, es legítima porque así está en la Constitución, y ésta es clara en que el rebase se hace por partido, no por coalición.

“ Para efectos de ir en contra del texto de la Constitución, tendríamos que encontrar que en su aplicación literal hubiera violaciones a los derechos humanos. La proporcionalidad en la representación legislativa no es un derecho humano.

“ No puedo tampoco interpretar que donde la Constitución dice partido político, podamos concluir que se trata de un sinónimo de coalición. Soy proporcionalista, soy demócrata, pero estoy obligado a respetar el orden republicano”, argumentó Uuc Kib Espadas.

Los representantes del PAN, PRD y Movimiento Ciudadano reclamaron que la nueva composición de la Cámara de Diputados no refleje los votos que cada partido obtuvo en la pasada elección del 2 de junio.

El representante del PAN, Álvaro Malvaez, insistió en que el INE es incongruente, pues aplicó a coaliciones la regla que solo aquellos partidos que postularon candidatos en 200 distritos podrán tener acceso a plurinominales.

Sin embargo, cuando se le pidió hacer lo mismo con la sobrerrepresentación del 8 por ciento, decidió que ahí sí sería por partido, no por coaliciones.

Acusaron a Morena de transferir votos a sus aliados PVEM y PT prestándoles candidatos para obtener más triunfos, lo que contribuyó, dijeron, a una distorsión en la integración.

“ Lo que estamos viendo es una auténtica transferencia de votos que permite a Morena, los distritos que ellos ganan, desplazarlos al PT y al Verde, simular que no ganó los triunfos que sí obtuvo para efectos de que se le asignen más diputados de representación proporcional. Eso creemos que es una distorsión muy grave, además, permite un fraude a la Constitución”, dijo el representante de MC, el diputado federal Braulio López.

En respuesta, los representantes de la 4T acusaron a la Oposición de pretender cambiar las reglas cuando ya pasó la elección y el resultado no les favoreció.

“ Tienen un resultado desfavorable y ahora pretenden (cambiar la distribución) con una argumentación ficticia y fantasiosa”, dijo el morenista Sergio Gutiérrez, quien argumentó que México no tiene un sistema de representación pura para que los votos reflejen tal cual las curules.

Incluso, los conminó a no temer por lo que hagan con su mayoría calificada en San Lázaro.

Su compañero del PVEM, Fernando Garibay, le hizo segunda: “Independientemente de cómo se obtuvieron los triunfos, la asignación de plurinominales es con base en los votos que obtuvimos. Las reglas estaban claras, la asignación se haría por partido, no por coalición”.
Ajustes por paridad

Por cuatro votos a favor y uno en contra, la Comisión también avaló que, para lograr la paridad total en ambas Cámaras, se quitara triunfos a dos hombres.

En el Senado había 65 hombres y 63 mujeres, por lo que se anuló el triunfo del líder de MC, Dante Delgado, para que entrara la ex Gobernadora Amalia García, y así ambos géneros tengan 64 escaños.

En la Cámara de Diputados, el sacrificado fue el priista Jorge Armando Meade, pues había 251 hombres y 249 mujeres, así que entrará su compañera Ofelia Socorro Jasso.

La distribución de 32 senadurías plurinominales fue aprobada por unanimidad.

Durante la sesión, dos consejeras y un consejero se quejaron de que la Dirección de Prerrogativas entregara el proyecto de acuerdo 24 horas antes de la sesión de la Comisión, pues, argumentaron, no tuvieron tiempos para revisarlo.