Cd. Acuña
Por Alma Proa
Publicado el domingo, 22 de junio del 2014 a las 14:00
Acuña, Coah.- La peor pesadilla para muchas personas es morir ahogadas, por lo que este temor se hizo presente en quienes habitan en los fraccionamientos Acoros, Fundadores, Sonora y Las Américas, a quienes la crecida de los ríos y arroyos sorprendió dormidos, por lo que al despertar, el agua prácticamente les llegaba al cuello, de un sobresalto salieron de sus viviendas para subir a los techos en un intento desesperado por salvar su vida.
“En cuestión de segundos vi cómo poco a poco se esfumaba ante mis ojos el patrimonio que a base de sacrificios mi esposo y yo llegamos a conformar durante más de 7 años”, narra María Rodríguez, quien radica en el fraccionamiento Fundadores y dijo que eran las 4:00 de la mañana cuando comenzó su pesadilla, ya que en cuestión de segundos el agua comenzó a subir, por lo que entre sueños sintió la humedad, su instinto de supervivencia le hizo reaccionar pronto para salvar lo más preciado que tiene, sus hijos, por lo que hoy agradece a sus vecinos esta nueva oportunidad de vida.
Rocío Segura es otra de las tantas afectadas por la inundación, a ella al igual que a María el agua la sorprendió dormida y fue gracias a su pequeña perrita Chihuahua que la despertó justo cuando el agua comenzaba a cubrir la cama, dijo que la perrita comenzó a ladrar, intentando consolarla, entre el sueño la quiso acariciar y fue cuando sintió la humedad, “me desperté toda asustada y no daba crédito a lo que veían mis ojos pues el agua subió muy rápido de nivel, desesperada grité para que mis hijos y mi nuera despertaran, la prioridad era poner a salvo a mis nietos de 5 y 1 mes de edad.
Salimos de la casa con los niños montados en el cuello, colocamos la escalera que por azares del destino estaba a la mano y trepamos al techo a la espera de recibir ayuda, fue ya aclarando cuando los elementos de Protección Civil y Bomberos llegaron a rescatarnos a bordo de una lancha.
“Todo se nos echó a perder, hoy nos quedamos prácticamente en la calle, estamos como cuando llegamos a esta frontera, nada más con lo que traemos puesto, la madrugada del viernes fue la peor de las pesadillas, ya no puedo dormir porque apenas cierro los ojos y llegan a mi mente los gritos de ayuda, el llanto de los niños y el grito desesperado de una mujer que no sabía donde estaba su pequeño hijo, esta situación me trajo el recuerdo del momento más doloroso de mi vida, que fue cuando vi morir a mi pequeña hija luego de una intensa lucha contra el cáncer”.
Éstas fueron las palabras expresadas por Nancy Martínez, quien declaró que el agua los agarró de improviso y poco fue lo que pudieron hacer para rescatar sus pertenencias.
Notas Relacionadas
Más sobre esta sección Más en Cd. Acuña