Saltillo.- Allí, justo dónde se fundó Saltillo y brota el agua brota también la fe, en el corazón del Barrio Mágico del Ojo de Agua los saltillenses encuentran ese líquido para calmar la sed física, pero también la espiritual, pues la utilizan para rociar su casa y bendecirla, para tomar cuando están enfermos y sentirse amados por Dios.

Durante todo el domingo miles de fieles llegaron a venerar la imagen del Santo Cristo y por supuesto llevarse un poquito de agua, extraída del ojito, unos provenientes de la misma colonia, por tradición heredada de generaciones, otros desde otro sector de la ciudad, otro estado y hasta otro país.

“ Pues es agua bendita la que está aquí, la riego los días primeros de cada mes en mi casa, así me enseñaron mis abuelos y mis papás. Le pido al Santo Cristo del Ojo de Agua que nos dé mucha salud, mucha fortaleza, todo, que bendiga a mis hijos y a mí” comentó la señora Juanita Delgado.

“ Pues hago casi 4 horas en avión desde Panamá, aquí está mi familia y pues aprovecho a ver mi familia que tengo aquí en Saltillo y vengo a la fiesta también” comentó la señora Aurora García.

Fue una jornada larga siempre el templo estuvo lleno

La jornada comenzó desde el amanecer con la misa de aurora a las 5 de la mañana, continuando con la misa solemne oficiada por el Obispo Monseñor Hilario González, quien resaltó la importancia que tiene la parroquia del Barrio del Ojo de Agua como hermana mayor en fe de los saltillenses.

En total fueron 13 celebraciones en las que los fieles llenaron el templo, prácticamente cada hora, mostrando su amor por Cristo y por las tradiciones heredadas por sus padres. Una de las más importantes es la de la procesión de la cera, en la que un contingente avanzó desde la Iglesia de San Juanita por las calles del barrio antiguo, mientras cargaban con sus imágenes y candelas.

La verbena popular no pudo faltar

Pero si la fiesta espiritual convocó a miles, la verbena popular lo hizo con otros miles, pues los juegos mecánicos y antojitos mexicanos como enchiladas, churros, aguas frescas gorditas entre muchos otros fueron disfrutados por los asistentes.

La jornada continuará con misas de 7,8 y 9 de la noche, para cerrar con el cielo iluminado por fuegos artificiales, con la quema de pólvora a las 11 de la noche.