Saltillo|Monclova|Piedras Negras|Acuña|Carbonífera|TorreónEdición Impresa
‘México no es colonia de nadie’: Sheinbaum defiende a connacionales en EU previo a investidura de Trump Mujer de 25 años da a luz en parque de la Cuauhtémoc, en la CdMx Inician diputados panistas campaña sobre ‘gasolinazo’ de Morena TikTok dice que está restableciendo su servicio en EU por garantía recibida de Trump Organismos y medios exigen justicia por el asesinato del periodista Cayetano de Jesús Guerrero

Zócalo

|

     

Opinión

|

Información

< Opinión

 

Nacional

‘El Mayo’ Zambada, ¿pacifista?

Por José Guadalupe Robledo Guerrero

Hace 8 horas

Una verdad de Perogrullo es que en política no hay casualidades, esto incluye al periodismo político. Por eso en este marco debemos colocar la entrevista que le hizo María Scherer al “Mayo” Zambada días antes de su detención (en julio de 2024) y que recientemente fue publicada por la revista Proceso.

Según la periodista, hija de Julio Scherer, la entrevista no la buscó ella, “El Mayo” la buscó, tal y como lo hizo con su padre, porque el capo algo quería decir, y lo dijo aunque fue poco o casi nada de interés. Y al igual que a su padre, “El Mayo” prometió que le daría una segunda entrevista y no se la dio. Y seguramente a María Scherer tampoco se la hubiera dado, pero su detención -según la periodista- evitó un segundo encuentro. Esa fue la justificación que dio, para decir por qué no la había publicado en su momento, hace seis meses.

La entrevista fue un texto de color, la mayor parte del escrito es detallar las cosas que vio: su vestimenta, los alimentos que comieron, la austeridad de sus casas, las pinturas colgadas en las paredes y los halagos que tuvo para su padre, al que exhibió provocadoramente en una foto que se tomaron al final de la plática donde “El Mayo” dijo lo que quería decir.

Curiosamente, la entrevista de María Scherer aparece cuando “El Mayo” Zambada está en negociaciones con la justicia de Estados Unidos para que no lo sentencien a muerte, y en los momentos que Donald Trump amenaza a México con calificar a los cárteles de la droga mexicanos como terroristas, y precisamente cuando Claudia Sheinbaum le pedirá a EUA que aclare la detención del principal narcotraficante de México y generador de la violencia.

Pero algo importante, es la percepción de la periodista con respecto a la violencia desatada en nuestro país por el crimen organizado, que se manifiesta cuando repasa algunas preguntas que quiere formularle al capo, una de ellas era la siguiente: ¿Piensa alguna vez en las víctimas del narcotráfico y de la sanguinaria política antidrogas que inició Calderón y que continúa regando muertos y desaparecidos hasta hoy? Esta pregunta muestra la misma percepción que tiene el obradorismo sobre la violencia que no han combatido, y de la que siguen culpando a Calderón.

Aunque la misma periodista se responde: “Casi un centenar de personas son asesinadas cada día y más de 20 desaparecen sin dejar rastro”. Y sin aclararlo, son las cifras del obradorismo y no de Calderón, cuya gestión presidencial fue hace 19 años, cuando le hizo la guerra a los cárteles de la droga.

“El Mayo” utilizó a María Scherer para decir lo que quería que se conociera en estos momentos amenazantes. Sobre la política de abrazos no balazos dijo “Tiene razón el presidente (AMLO), los balazos son muy peligrosos”. También mandó un mensaje: Negó producir Fentanilo, porque “el fentanilo es muy peligroso”, asegurando que las tienditas y los laboratorios que se han desmantelado en Sinaloa “no son mías”.

Otro mensaje de “El Mayo”, semejante al que argumenta el obradorismo, es que “la prensa dice mentiras”, sin mencionar ninguna de ellas, pero acepta que los narcos están en todas partes, en las policías, en las alcaldías y que hay algunos gobernadores metidos con los capos. “Hay de todo”. La entrevista es un texto de contradicciones, pues el Mayo no se asume como narcotraficante y asesino, sino como un agricultor, un pacifista, que sólo se defiende.

A María Scherer, al igual que a su padre, la impactó la personalidad del capo, el que a pesar de su ilegal negocio y sus múltiples asesinatos, se autocalifica como un “pacifista”, que tiene en su casa una frase de Mahatma Gandhi sobre el pacifismo, y pontifica: “La paz no se dice, la paz se hace”. De ser cierto el pacifismo de “El Mayo”, no dude usted que pronto será propuesto para el Nobel de la Paz por sus aliados obradoristas.

Lo cierto, es que en dicha entrevista no hubo ni siquiera en el pensamiento una pregunta toral, por ejemplo: ¿Hay un pacto entre AMLO y los cárteles de la droga? ¿Es usted el líder del cártel de Sinaloa?, pero lo publicado es halagüeño para “El Mayo”, porque lo retrata con una gran personalidad, y lo dibuja como un hombre importante, digno de escuchar sus mentiras y contradicciones, el que sedujo a la periodista, mostrándole su respeto a Julio Scherer, respeto que no se ve en la provocadora foto que se tomaron hace años.

Por eso no es creíble que dicha entrevista sea casual, sino parte de lo que el obradorismo quiere ocultar y tergiversar, para consumo de las masas. Sin decir mucho y sin haber contestado nada, la entrevista fue publicada seis meses después, para que sirva de algo a la narrativa presidencial, el resto fue provocado por la mercadotecnia.

Pero algo es verdad, la entrevista de María Scherer proporciona nuevos elementos para hacer un corrido que enaltezca al capo. “El Mayo” pacifista, agricultor, que ha sufrido la muerte de uno de sus hijos. Por favor, “A otro chango con esa maroma”.

Política aldeana

A raíz de la columna de la semana pasada en donde señalé las actitudes de Óscar Pimentel González como desleal, intrigoso y oportunista, me llegaron comentarios de conocedores de la política y funcionarios confirmándolas y añadiendo su irrelevancia e ineficiencia como Secretario de Gobierno, ya que en vez de trabajar por la gobernabilidad y la política interna del estado se ha dedicado a hacer su agenda propia.

A Pimentel le han ido quitando facultades y se dedica a encargos menores como asistir a eventos y llevar a cabo reuniones para temas coyunturales en los cuales ha fallado, como la regulación de los anexos y la instalación de albergues, ambos temas por los cuales ha recibido críticas de organizaciones civiles y alcaldes fronterizos que lo acusan de ir a las reuniones para tomarse fotos y no dar seguimiento ni coordinación institucional.

Otro señalamiento contra Pimentel es por presuntamente haber provocado el conflicto entre el alcalde de Torreón, Román Alberto Cepeda, con el Gobierno del estado. En su círculo cercano, el alcalde torreonense culpa a Pimentel de haber causado los supuestos malos entendidos que propiciaron el distanciamiento con el estado, derivados del desacuerdo por el horario de venta de alcohol en la Feria y el desempeño de un grupo policial. A lo anterior le siguieron episodios de soberbia y desplantes en eventos públicos, y las grillas palaciegas y chismes de Pimentel.

También hay señalamientos de presunta corrupción contra Óscar Pimentel relacionados con supuestos negocios de contratos a proveedores que realizan sus cercanos desde el instituto de salud del magisterio. Este tipo de acusaciones no son nuevas para Pimentel, pues como recordarán los saltillenses, siendo alcalde de Saltillo de 1999 a 2002 se le hicieron múltiples señalamientos de corrupción que incluyeron la venta del agua, la venta ilegal de placas de taxis, pago ilegal de proveedores, venta de terrenos municipales, entre otras.

Preguntas huérfanas

¿Qué le pasará a Morena cuando no tenga para pagar las pensiones con que compra votos?

¿Qué más le falta hacer a la 4T para allegarse de recursos? ¿Aumentar los impuestos, apropiarse de las reservas nacionales o poner a funcionar la máquina de hacer billetes?

Más sobre esta sección Más en Nacional

Hace 7 horas

¿Nuevos partidos o partidos reciclados?

Hace 8 horas

Mañana será un día para la historia

Hace 8 horas

Van por lugar en la Corte con uniforme guinda