Coahuila
Hace 3 horas
En los membretes oficiales, 2024 en lo Federal fue “Año de Felipe Carrillo Puerto, benemérito del proletariado, revolucionario y defensor del Mayab”; y en lo Estatal “Año del Bicentenario de Coahuila, 200 años de grandeza”.
En los hechos, sin embargo, el ejercicio fiscal en curso ha sido el “Año del carbón”, pues en la historia contemporánea, nunca como en este ciclo, la Comisión Federal de Electricidad había pagado tanto por mineral en la entidad.
Hubo adjudicaciones directas en febrero, junio, julio, septiembre y octubre. Es decir, al finalizar un sexenio presidencial y al empezar el otro. Un total de 5 mil 234 millones de pesos por presunta materia prima de las cuencas del Río Sabinas y Río Escondido.
Y aquí viene lo interesante: ¿quiénes fueron los capitanes del negocio?
Por cuarto año consecutivo el favorecido con mayor cuantía fue Antonio Flores Guerra y familia, agrupados en las personas morales Minerales Don Chilo, La Sierra Minería y Transporte, Grupo Industrial Guerra y Asociados, Minerales Amarani, Minería y Transporte, Minerales y Transporte, además de los satélites Beneficios Carboneros AJ y Desarrollos Carboneros Mexicanos.
En un par de ministraciones pactadas el 7 de febrero, se embolsó 2 mil 559 millones 372 mil 804 pesos. El resto, 2 mil 675 millones 265 mil 725 pesos, se dividió entre 31 empresas distintas (algunas de las cuales serán objeto de otra columna).
La Floriza, como se autodenominan él y su hermana, la Alcaldesa de Múzquiz por Morena, irrumpió en 2021 para ocupar un lugar en el mercado que anteriormente pertenecía a Prodemi, por lo que hace a una variedad de carbón, y Alonso Ancira, el mayor concesionario de lotes del otro tipo, el más apreciado: “no coquizable”.
Con ellos fuera de la repartición, pues ya no han sido considerados en las últimas siete rondas de adjudicación, se abre una posibilidad para que otros jugadores intervengan.
Ahí es donde resuenan las palabras de la Presidenta de la República: “Un legislador no debe tener contratos con el Gobierno, hay que buscar si se puede legislar en torno a ello”, dijo Claudia Sheinbaum, cuestionada en torno a los millones adjudicados a “Tony” Flores, directamente o por interpósita persona, convertido entonces en Lord Lamborghini, a la sazón diputado local por el PT en Coahuila (la 4T, a fin de cuentas).
El caso tiene matices, ya que puede que no sea un diputado federal o senador el involucrado, sino sus socios, familia o testaferros. Y aquí, a propósito, hay otro conflicto de interés en la lista de beneficiados; más reciente que las transacciones con “Tony”.
El pasado 27 de junio le fueron adjudicados 78 millones 689 mil 880 pesos a Compañía Minera Zapalinamé, S.A. de C.V., y el 10 de julio se protocolizó el contrato. Después de las elecciones federales.
¿Le suena el apellido Guadiana? Pues la razón social, creada en Saltillo en 1993 por César Ariel Rodríguez Guadiana, forma parte del consorcio empresarial Minsa (Materiales Industrializados, S.A. de C.V.), del cual era dueño y presidente de la asamblea de socios el finado Armando Guadiana Tijerina, su tío.
Se trata de una sociedad mercantil que desde 2016 año en que dejó de vender carbón a CFE, por lo menos formalmente al incursionar en candidaturas el ex Senador- no tenía movimientos importantes ni cambios notariales, salvo un contrato por 32.8 millones de pesos adjudicado el 18 de marzo de 2021 para la “perforación de pozos y apoyo en maniobras in situ en Pasta de Conchos”.
Para que no quede duda quién es el dueño de la misma, el 11 de julio de 2024, es decir, 24 horas después de firmar el negocio por 78.7 millones de pesos con vigencia al 31 de diciembre de 2025, César Ariel formalizó el endoso de sus acciones, equivalentes al 99.5%, como había transferido en asamblea de accionistas celebrada el 2 de mayo, a favor de Armando Guadiana Tijerina, representado por su albacea para la sucesión testamentaria, María Guadalupe Mandujano Flores, su viuda, como consta en el instrumento 14, celebrado en la Notaría 88 de Saltillo, cuyo titular es Alfonso Argüelles.
Cortita y al pie
No sólo eso, en el acto ella, para mayor referencia: la madre de la Senadora de Morena por Coahuila, Cecilia Guadalupe Guadiana Mandujano, se convirtió también en apoderada de Compañía Minera Zapalinamé. Así se cierra el círculo.
La última y nos vamos
La Presidenta de la República ya condenó el nepotismo, en específico la sucesión de un familiar a otro en los cargos de elección popular, y también los contratos de los legisladores con el Gobierno, directos o indirectos.
Pero es jarabe de pico, pues en la práctica están presentes en Coahuila en torno a las mismas familias: Los Flores y Los Guadiana.
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