Torrón.- La fundación lagunera que ofrece refugio a mujeres en situación de violencia, junto con sus hijas e hijos bajo un estricto protocolo de confidencialidad y con un programa de apoyo integral para su reinserción, es un ejemplo de los esfuerzos de unas cuantas personas por mejorar una sociedad en crisis.

“Cambiando vidas cambiando mentes A.C.” se creó en 2019 por iniciativa de su actual presidenta Gisela Castro Valdez, quien luego de cooperar en diferentes colectivos en apoyo al sector femenino en vulnerabilidad, detectó una gran necesidad de brindar a mujeres y a su familia en peligro por el entorno de violencia, un lugar donde permanecer a salvo.

Para mayo de 2020, en plena pandemia, abrió el refugio en un sector de Gómez Palacio, del cual solamente muy pocas personas conocen exactamente su ubicación, pues ni siquiera las usuarias saben donde se encuentra, por eso cuando trasladan a una mujer con hijas e hijos que previamente solicitó apoyo al estar en peligro su vida por la violencia, primero la citan en un lugar público, posteriormente le vendan los ojos como parte del protocolo, pues temen a que de lo contrario, puedan regresar con sus agresores y emitan información confidencial.

Activismo para la defensa de la mujer

Luz Elena Martínez García, coordinadora operativa del refugio, desde hace 36 años está involucrada en el activismo para la defensa de la mujer, y durante ese periodo han canalizado a instituciones a un número elevado de víctimas, incluyendo algunos casos relacionados con feminicidios ocurridos en la Región Lagunera.

Apoyo y servicios

El refugio es un lugar donde se salvaguarda la integridad de las mujeres, a sus hijos e hijas de la violencia extrema, aquí se les proporciona casa, vestido, sustento y apoyos diferentes como atención psicológica, legal, trabajo social, médico, además de programas para su reinserción laboral, pero sobre todo la seguridad que conlleva a alejarlas del agresor y garantizar su estabilidad, por eso resaltan fuerte y claro que cambian vidas y cambian mentes.

Luz Elena Martínez menciona que si bien no puede proporcionar el número de mujeres que actualmente se encuentran en el refugio, este espacio tiene una capacidad para 15 usuarias y desde su apertura hasta el día de hoy, se han atendido a 72 mujeres víctimas de la violencia.

“ No decimos cuántas, porque muchas veces los agresores las buscan, entonces pues es una situación de proteger tanto a las personas que ahí resguardamos su integridad como a las personas trabajadoras”.

Las usuarias del refugio, no necesariamente viven en Gómez Palacio, o inclusive en la Región Lagunera, pues atienden a toda mujer que necesite apoyo.

Cabe resaltar que solamente puede ingresar con sus hijos menores de edad o en custodia, es decir con alguna discapacidad.

E inclusive la coordinadora señaló que no necesariamente tienen que haber denunciado a su agresor como anteriormente se pedía, esto debido a las modificaciones realizadas por la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres, (CONAVIM) encargada de normar los refugios en el país, pues reconoce que no pueden obligarlas a realizar este proceso legal por el riesgo que implica.

Bajo los lineamientos del modelo de atención del refugio a nivel nacional, las usuarias pueden permanecer en promedio un periodo de 3 meses, sin embargo,esto depende de la gravedad de la situación, cabe destacar que no deben contar con una red de apoyo.

En un entorno social complicado, los principales agresores en su mayoría son la pareja sentimental, pero actualmente también se han detectado otros actores como padres de familia.

Difícil el sostén del refugio

“Cambiando vidas, cambiando mentes A.C.”, ha enfrentado una serie de batallas con victorias ganadas, como permanecer con el refugio, cuyo sostenimiento no es fácil. Hace dos años empezaron a recibir apoyos de la CONAVIM, a través del Programa Nacional de Refugios, así como también la alcaldesa de Gómez Palacio, Leticia Herrera Ale brinda una aportación económica, sin embargo, continúan con necesidades.

Entre las principales, consisten en alimentos para el diario, perecederos como verduras y frutas.

“ Sí nos donan, no te digo que cantidades, pero las usuarias vienen en condiciones de desnutrición la mayoría de las veces, de mala alimentación, no saben alimentarse o no han podido por la situación de extrema violencia, y los hijos peor”.

De igual forma, necesitan ropa interior nueva tanto de mujer, como también para niños y niñas. Para las personas que deseen hacer una donación al refugio, se pueden poner en contacto con la fundación a través de su cuenta de Facebook cambiando vidas, cambiando mentes A.C.

Ante la conmemoración del 25 de noviembre, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, Luz Elena Martínez llamó al sector femenino a no permitir la violencia, a informarse.