Sí, sólo era cuestión de tiempo. Y sí, finalmente “salió el peine”. Y es que así, “como pateando un bote”, en el primer encuentro entre “la señora Presidenta” y el Mandatario saliente de Estados Unidos, la mexicana le soltó a bocajarro al norteamericano la pregunta impensable en un foro global, como el G-20.
Sí, antes que cualquier otra cosa, Claudia Sheinbaum interrogó a Joe Biden, sobre los entretelones que llevaron a la captura del mayor criminal mexicano y jefe del cártel de Sinaloa, Ismael “El Mayo” Zambada.
Así lo explicó la propia Presidenta en su “mañanera” de ayer: “En efecto, al presidente Biden le planteé (sic) que era importante para México tener toda la información relacionada con la reciente captura (de ‘El Mayo’ Zambada) y escuchó, pero no tuve una respuesta directa y dijo que lo iba a revisar…”.
Y es que, en efecto, el Mandatario de Estados Unidos le dio vuelta a la pregunta y, por tanto, dejó a la Presidenta con un palmo de narices. Lo ridículo del tema es que sólo a una “Presidenta ingenua” –por decirlo suave– se le ocurre que en un breve encuentro protocolario –como el G-20, en Brasil– el Presidente norteamericano le daría todos los detalles de la mayor detención en décadas.
Sin embargo, la verdadera revelación no es la “ingenuidad” de la señora Presidenta, sino su ignorancia sobre uno de los asuntos de mayor tensión entre los dos países y, sobre todo, la confirmación de que los sistemas mexicanos de “inteligencia” no tienen ni la más remota idea de los intríngulis que llevaron a la captura del líder de el cártel de Sinaloa.
Es decir, que si la presidenta Claudia no sabe qué pasó y cómo se fraguó la captura del mayor criminal sinaloense –captura que se produjo en la última parte del Gobierno de Biden– entonces de nada sirven las instituciones mexicanas de inteligencia y seguridad nacional.
Y si esas instituciones son un fracaso, entonces la Presidenta y los mexicanos todos tampoco nos vamos a enterar y no podremos hacer nada para impedir el eventual desplazamiento de efectivos militares que podría ordenar Donald Trump, para la captura de todos los capos de los cárteles criminales que operan en México.
Pero lo más preocupante del escándalo es que, una vez iniciado el Gobierno de Trump, no sólo los líderes de las bandas criminales aliadas a Morena, deberán estar en alerta máxima, sino también los “narcopolíticos” de ese partido; incluidos los “narcogobernadores”, “narcolegisladores” y, sobre todo, el “narcoexpresidente” López Obrador.
Y es que desde que autoridades norteamericanas capturaron a “El Mayo” Zambada –el 25 de julio del 2024, en el Paso, Texas– el embajador Ken Salazar dijo, de forma insistente, que mantuvo comunicación constante con la Fiscalía General de la República, para informarle sobre el operativo.
Sin embargo, el fiscal general, Alejandro Gertz Manero, aseguró que nunca recibió un informe completo del arresto. Y por eso obliga preguntar: ¿Quién miente; el embajador Salazar, el fiscal Gertz Manero, o la presidenta Sheinbaum?
Lo cierto es que todos en el Gobierno de “la señora Presidenta” están en alerta máxima, frente a la eventualidad de que, al final de cuentas, “El Mayo” Zambada dé a conocer todo lo que sabe sobre el financiamiento, por parte del crimen organizado a Morena.
Y es que para nadie es novedad que cárteles como el de Sinaloa –entre otros– financiaron no sólo el nacimiento del partido Morena, sino las campañas presidenciales de López Obrador, de todos los “narcogobernadores” del partido oficial; financiaron a no pocos “narcodiputados” y “narcosenadores”, además de que el crimen organizado impuso a la mayoría de los alcaldes “morenistas” en todo el país.
Pero día con día es mayor la preocupación de Palacio –sobre lo que pudiera revelar “El Mayo” en Estados Unidos– ya que el líder del cartel de Sinaloa también operó en buena parte del país en las pasadas elecciones presidenciales que llevaron al poder a la espuria Sheinbaum Pardo.
Por eso la prioridad de “la señora Presidenta” es adelantarse a los acontecimientos, para intenta hacer un trato, sea con “El Mayo”, sea con el Gobierno de Estados Unidos.
Y también por eso no resulta descartable que, en cualquier momento aparezcan las traiciones políticas, al interior de Morena y del Gobierno de la espuria Claudia.
Y es que con “El Mayo” en prisión, el tiempo de los canallas están por llegar. ¿Lo dudan?
Al tiempo.
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