Saltillo, Coah.- A sus 19 años solamente tiene el bachillerato terminado pero, mensualmente, gana más dinero que la mayoría de los profesionistas en Saltillo; vive de su cuerpo, pero nadie le pone un dedo encima, pues María Fernanda solamente crea contenido para Only Fans, en dónde ha enganchado a 38 mil suscriptores en apenas 4 meses.

Es la creadora de este tipo de contenido más joven en la ciudad, lo que habla de que la socialización de esta plataforma avanza pese a lo conservador de la capital; hubo pioneras en este oficio como Alejandra Flores, quien tiene 5 años como creadora de contenido en OF y de allí ha obtenido el sustento para su hijo, logrando poner su negocio.

La también llamada página azul se ha convertido en una manera de generar altas ganancias aprovechando el deseo sexual, sin que esto implique poner el cuerpo en riesgo, solamente “hay que saber hacer el negocio”, como Natalia Londoño, quien es una colombiana que lleva más de una década viviendo en Saltillo, en tiempos de la pandemia necesitaba dinero urgente para pagar los gastos médicos de su abuelita, encontrando en el Only Fans la respuesta.

Los pies más deseados Una tarde, Alejandra fue a comprar zapatos y se le ocurrió grabarse mientras se los medía; en pocos minutos vio como la correa había irritado parte de su empeine y, a manera de anécdota, subió el video a su TikTok sin saber que, con ello, atraería a un grupo selecto de “podófilos”, es decir, quienes se excitan sexualmente con ver los pies de una persona, usualmente mujeres jóvenes.

“ Cuando volví a checar la cuenta de TikTok tenía 500 mil reproducciones, luego 1 millón, y así aumentó hasta 4 millones; es más, ni me compré esos zapatos”, narra la mujer, también madre de un adolescente.

Ese video la hizo tener una idea de negocio que hoy le permite tener una florería que financió con las ganancias que los suscriptores de su Only Fans le dejan, pues mes a mes pagan una cuota para ver las fotografías y videos que publica, dónde el gancho es exhibir sus pies, los cuales se han convertido probablemente en los más deseados de la ciudad.

Tiene 300 seguidores que pagan en promedio 7.5 dólares al mes, es decir que obtiene 36 mil pesos mensuales, pues la plataforma les quita un 20% del dinero. Pero si vende videos más explícitos puede cobrar 10, 15, 20, 30 o más dólares por cada uno, elevándose la cifra de remuneración.

Aunque la joven, oriunda de Ciudad Acuña, empezó solamente con videos y fotografías de pies, ya ha incluido la lencería y semi desnudos con poses sugerentes. Pero todo lo hace parecer espontáneo, no necesita tanta producción, pues así los suscriptores “se imaginan” que es su novia la que se los envía.

Tiene sus consecuencias

Alejandra está orgullosa del negocio de florería, pero sabe que el dinero que gana allí es menor que el del OF, por ello ha aprendido a lidiar con situaciones incómodas por vender contenido, como que constantemente le pidan hacer encuentros sexuales, o que conocidos la vean desnuda en su perfil.

“ Se suscribió una persona que yo conocía que era familiar, y lo bloqueé. Te dicen que, si haces encuentros, te invitan a salir, piensan que eres acompañante, pero ya depende de cada quién. Yo nada más hago contenido, no salgo con nadie”, advirtió.

Es madre divorciada y tiene que sacar a su hijo adelante, por lo que se ha tomado muy en serio lo de crear contenido y monetizar con ello, pese a las críticas, pues nadie le va a dar el dinero que gana con sus suscriptores.

“ Cuando lo inicié, como ganaba muy bien, no me importaba, pero ahora como mi niño ya creció me empecé a preocupar. Sinceramente se gana muy bien y eso me motiva a seguir, aunque claro que no pienso que sea para siempre, pero tampoco tengo un límite establecido. He visto mujeres que tienen Only Fans a sus 60 años y siguen”, señaló la comunicóloga de profesión.

Joven y rica

María Fernanda está en el mundo de las redes sociales desde los 17 años, creando contenido para Instagram y TikTok, pero desde hace unos meses incursionó en Only Fans, y aprovechando que su base de seguidores en “Insta” es de más de 600 mil, pudo alcanzar los 38 mil suscriptores en sólo 16 semanas.

“ Decidí empezar a crear contenido por problemas de dinero aquí en la casa, por problemas familiares también, son varias variantes, pero también porque el pago en muchos trabajos es muy bajo y también las oportunidades de trabajo para los que sólo tenemos bachillerato son muy pocas”, comentó la joven creadora de contenido.

Empezó con el tema de pies y lencería, pero a las pocas semanas su público le pedía que “elevara la temperatura” y ella accedió porque con ello su popularidad crecía y sus ingresos también.

“ Ahorita ya vendo desnudos explícitos, lo que más me piden son videos en vivos y chats, responder preguntas es lo que más les gusta”, sentenció la joven, quien contestó la llamada desde Colombia, pues está en un viaje internacional con su familia, aprovechando la bonanza económica que le ha dejado su nuevo oficio.

Un dilema moral

Aunque la jovencita hacía contenido de moda, veía el gran impacto que tenían sus redes sociales de Instagram y TikTok entre los varones, por lo que vio que podría capitalizarlo en la plataforma azul, sin embargo, el miedo a ser estigmatizada y la vergüenza con su familia la detenían.

“ ¿Por qué no animarme? ¿Por qué no hacerlo? Si hay muchas personas que lo están haciendo y no es algo físico, no es algo que yo esté haciendo presencialmente”, indicó.

Las primeras semanas le llovieron las críticas, incluso de personas que creyó que la apoyarían en cualquier situación, pero ya estaba allí y decidió no dar un paso atrás, sino al contrario dar muchos más para seguir adelante.

“ La gente te crítica, pero ya hay un punto en el que ya dices ‘basta de comentarios así’, basta, incluso, de lo que piense la familia, porque a veces dentro de la misma familia. Uno está súper decidido, pero, ¿qué pasa? Que uno en su cabeza dice y dice que qué va a pensar la familia, mi mamá, mi papá, mis tías, mis abuelos, en fin, pero yo lo dije: la familia tiene sus propias decisiones”, sentenció la joven.

El apoyo que no encontró en algunas personas lo halló en su novio, quien incluso le ayuda con la producción del material audiovisual, le toma las fotografías, le acomoda la iluminación, le sugiere como posar para que les guste a los hombres y le da su apoyo moral siempre.

Si actualmente tiene 160 suscriptores que pagan 10 dólares, es decir, casi 200 pesos, obtiene poco más de 25 mil pesos mensuales, ya quitando la comisión de la plataforma, pero además los cientos de dólares extras por videos más largos y personalizados.

Sin embargo, no todo es “miel sobre arepas”, pues, como todo hay pros y contras; en este caso la estigmatización social, el asecho, acoso y el riesgo de ser deseada por gente poderosa.

“ Yo aprendí a balancear, ya no me afecta, porque yo gasto mi energía en las cosas que me dejan plata; si no me sirve lo bloqueo, a veces también hago chistes como para drenar”, señaló.

La situación que más la hizo sentir vulnerable fue cuando al llegar al fraccionamiento privado dónde vive; un hombre estaba allí esperándola para fotografiarse con ella.

“ Una vez llegó un seguidor a la puerta del Fraccionamiento a pedirme una fotografía, y eso fue agobiante porque transgredió la barrera de lo virtual; una cosa es sentirse en confianza y otra que, de sorpresa, haya llegado. Yo creo que me siguió desde el restaurante hasta mi casa, es la única posibilidad”, lamentó.

Y entre las propuestas indecorosas que le han hecho, la más alta es la de 5 mil dólares por salir con ella y, aunque fue tentador, decidió no aceptarla.

“ Me han ofrecido 5 mil dolaritos, que esas sí dices ‘ah, carajo, me interesa’. Fue a cambio de salir con alguien, pero yo me puse a pensar también… Alguien que tenga 5 mil dólares para perderlos conmigo, es porque no anda bien, entonces el miedo te gana: A mi me ganó”, dijo.

Continuará…

Pero… ¿Qué dicen los sicólogos de este fenómeno sexual digital? ¿Por qué las personas están dispuestas a pagar por ver a alguien desnudo? ¿Qué dicen los sexólogos del fetichismo de pies, que gana más adeptos cada vez? Y sobre todo ¿qué dicen los que consumen este contenido erótico? De eso tratará el siguiente número de Ruta Libre.