Pocos lugares en el continente Americano tienen una gran preocupación por una nueva Presidencia de Trump como México, la nación que el Presidente electo convirtió en blanco de numerosas amenazas durante su campaña.

Ahora que Donald Trump se prepara para regresar a la Casa Blanca, México se encuentra de nuevo en el centro de sus agresivas posturas sobre comercio, inmigración y narcotráfico, las promesas de campaña de Trump sugieren un camino complejo y polémico por delante.

A continuación, cuatro cosas que hay que saber sobre Donald Trump y las relaciones de Estados Unidos con México.

1. Reforzar la seguridad fronteriza y deportar a millones de inmigrantes

Trump tiene grandes planes para rehacer el sistema de inmigración de Estados Unidos. Los cruces ilegales en la frontera están en sus niveles más bajos en más de cuatro años. Aun así, Trump ha dicho que su Gobierno contrataría a 10 mil nuevos agentes para patrullar la frontera entre EU y México, y ha propuesto utilizar parte del presupuesto militar para la seguridad fronteriza.

Trump también ha prometido llevar a cabo el mayor programa de deportaciones de la historia estadunidense, dirigido a muchos de los 11 millones de inmigrantes indocumentados que se calcula que viven en Estados Unidos.

Si los migrantes mexicanos son enviados a casa, gran parte del dinero que envían a México -63 mil millones de dólares, en 2023- se desplomaría, agotando a la economía de México de una de sus fuentes más importantes de ingresos.

2. Aranceles de hasta el 100 por ciento

Trump ha amenazado con imponer aranceles a México, que ha eclipsado a China para convertirse en la mayor fuente de importaciones de Estados Unidos.

En uno de sus últimos mítines, prometió imponer de inmediato aranceles del 25 por ciento a todos los productos procedentes de México, a menos de que el Gobierno detenga el flujo de migrantes y drogas hacia Estados Unidos.

Esto podría conmocionar a México, que depende en gran medida del comercio con Estados Unidos. Alrededor del 80% de sus exportaciones se destinan al mercado estadunidense, según Capital Economics, una empresa de investigación con sede en Londres.

Trump también ha amenazado con imponer aranceles del 100% -o incluso del 20%- a los vehículos importados de México. Esto podría asestar un duro golpe a una industria que exporta cerca de 90 mil millones de dólares en vehículos terminados a Estados Unidos, lo que representa alrededor del 5% del PIB de México.

Pero dado lo profundamente conectadas que están las cadenas de producción entre México y Estados Unidos, una medida como esta probablemente perjudicaría también a las empresas y consumidores estadounidenses.

3. Fuerza militar contra los cárteles

Durante su anterior mandato, Trump sugirió disparar misiles a México para acabar con los laboratorios de droga. Otros líderes republicanos han abrazado desde entonces la idea de utilizar la fuerza militar gringa contra los cárteles en territorio mexicano, incluso sin el consentimiento de México.

En una entrevista con Fox News, en julio, se le preguntó a Trump si estaba dispuesto a utilizar la fuerza militar contra los cárteles mexicanos. “Absolutamente”, dijo Trump. “México va a tener que enderezarlo muy rápido, o la respuesta es absolutamente”.

Esto podría poner en peligro toda la cooperación entre los dos países, incluidos los lazos comerciales, pero también los esfuerzos para controlar el flujo de migrantes y drogas, como el fentanilo, hacia Estados Unidos. Las autoridades mexicanas han advertido que no se tolerará la violación de la soberanía del país.

4. AMLO tenía una buena relación. Sheinbaum intentará replicarlo

Sheinbaum ha dicho en repetidas ocasiones que México colaboraría con cualquier líder de EU, incluido Trump. “No hay motivo ninguno de preocupación”, “Va a haber buena relación con los Estados Unidos, estoy convencida de ello”.

Andrés Manuel López Obrador, predecesor y mentor de Sheinbaum, también se enfrentó a los aranceles prometidos por Trump. Disipó esas amenazas desplegando a las fuerzas armadas de México para gestionar el flujo de migrantes. La estrategia funcionó para el ex presidente, hasta el punto de que se jactó, en varias ocasiones, de cómo había convencido a Trump para que moderara sus decisiones.

No está claro si Sheinbaum tendrá la misma influencia sobre Trump, pero la Presidenta ya empezó a hacer su tarea,  ya se aplicó, pues ya tuvo una llamada con Donald Trump este jueves.

La llamada -que tuvo lugar a las 9:30 horas- fue “muy cordial”, aseguró en un breve mensaje en su cuenta de X, el cual acompañó con una foto en el despacho en Palacio Nacional desde el cual sostuvo la conversación con el próximo Presidente de Estados Unidos.

Sheinbaum aseguró que en la conversación habló con Trump de la “buena relación que habrá” entre México y Estados Unidos.

Usted, amable lector, ¿cómo vislumbra la relación de nuestro país con el otra vez Presidente de los Estados Unidos de América?

Buen fin de semana, la frase: “Todo llega en el momento indicado.” ¡Ánimo¡