Saltillo, Coah.- Tras recibir el Premio al Mérito Restaurantero por la CANIRAC Nacional, el joven emprendedor saltillense Braulio Cárdenas Abedrop, reconoció los años de esfuerzo y creatividad de quienes le anteceden en una familia dedicada al arte gastronómico.

En entrevista para Despega Con Chuchuy de TeleSaltillo, el director de La Casa del Caballo desde hace tres años, se mostró profundamente agradecido, particularmente con sus mentores como son su padre Don Braulio Cárdenas, así como con Don Carlos Abedrop.

“La vida va dando vueltas, pero cuando ya decidió estar de lleno en el negocio familiar fue hace 6 años… de repente se alinean los astros en la vida y decido continuar con lo que ya hizo mi familia”, externó, al recordar su infancia entre las cocinas y el comedor, con grandes ejemplos a seguir. Luego de sus estudios universitarios en la ciudad de México, también estuvo laborando Consultoría estratégica y luego un negocio de entrega de alimentos en esa capital.

Aunque La Casa del Caballo, ya contaba con un renombre bien arraigado entre los saltillenses desde 2002, en un nuevo entorno económico había que inyectarle innovación y nuevos aires, lo que fue posible con la visión y la energía de Braulio, cristalizado desde el cambio de instalaciones en Parque Centro.

En esta ubicación con un alto flujo de extranjeros, han logrado posicionar la gastronomía regional, en medio de una gran competencia de establecimientos de todos los giros.

“ Por ser una ciudad automotriz, que tenemos muchas empresas globales, tenemos mucho flujo de comensales extranjeros y la verdad es que estamos muy contentos de estar ahí”, dijo el empresario.

Por su desempeño, el empresario fue reconocido por este gremio a nivel nacional. Es la fuente de empleo de unos 25 colaboradores, muchos de ellos que han hecho carrera con esta familia restaurantera. Braulio reconoció el respaldo de los trabajadores, de quienes depende el servicio a los clientes, parte fundamental del éxito del negocio.

“ Cuando a alguien se le reconoce su trabajo, le echas ganas, lo estás haciendo genuinamente, con ganas de salir adelante, de cada vez hacerlo mejor, la verdad es que es algo muy bonito… no es un logro mío exclusivamente, de hecho, yo diría que es parte de todo el equipo de la Casa del Caballo, que hemos estado esforzándonos”, dijo.

Destacó que en este giro de negocios, “siempre hay que estar al pie del cañón. Un restaurante es algo muy diverso, tienes que ver no sólo la atención al cliente o de la calidad de los alimentos, sino también, las instalaciones, manejo del personal, etcétera”.