Saltillo, Coah.- En una antigua calle de Madrid, España, hay un espacio para los libros. Sus cristales flanquean una puerta de madera que protege miles de páginas. Fundada en 1946, la librería Pérgamo es la más antigua de la capital española y en 2021 estuvo a punto de desaparecer. 

Sin embargo, los lazos de la memoria son fuertes, en especial para alguien como el escritor mexicano Jorge F. Hernández, quien apoyado por un empresario anónimo se dedicó a renovar la librería y mantenerla para los lectores. Aunque un trabajo así no puede hacerse solo, y por eso consiguió un equipo en el que se encuentra una saltillense: María Treviño Garza.

La aventura de la joven de 27 años inició con un deseo: convertirse en escritora, razón por la que decidió estudiar la maestría en Escritura Creativa en la Universidad de Navarra, España, cuando tenía 17 años. Tras graduarse, comenzó la búsqueda de empleo en la que encontró en Pablo Cerezo, su compañero en la librería, un amigo, junto con Hernández quien finalmente le dio el trabajo.

Si algo rescató a Pérgamo de la muerte, es que es un lugar querido por los lectores y las personas del barrio en el que existe. Porque una librería es más que una tienda en donde se venden libros, es un punto de encuentro con otros, con alguien que comparte tus gustos.

En un reportaje para el medio de radio español Hora25, Treviño apuntó que “tenemos clientes muy fieles en el barrio” eso se demostró cuando abrieron un espacio en la Feria del Libro de Madrid y el sondeo demostró que “los clientes prefieren venir aquí. No sólo porque les quede cerca, sino también para vernos, para seguir con la dinámica. Y eso habla muy bien, creo, de la librería y de que podemos hacer ese desdoblamiento y que haya movimiento y que permanezca lo que hay todos
los días”.

En una entrevista previa con Zócalo, Hernández hizo alusión a los tres jóvenes que le ayudaban en el trabajo de mantener al librería como “muchachos más rápidos y ágiles que yo. ¿Qué haría yo al subir unas escaleras para bajar un libro? Subirlo puedo, bajarlas no sé”, dijo con el humor que lo caracteriza.

Esos ayudantes son Cerezo y Érika Ambrosio, ambos de España, y Treviño quien también estudió en la Universidad Complutense de Madrid en 2021, fue ahí cuando consiguió el trabajo que la ha acercado al círculo cultural y literario de la ciudad.

Ya que como dice la librería en su página web “con el ánimo intacto de la vieja madera de sus estantes, Pérgamo es un bosque en cuyo claro se reúnen cómodamente hasta 30 invitados a presentaciones de libros, conferencias y tertulias, así como el diario festival de conversaciones y recomendaciones que comparten visitantes con los libreros. Aquí se habla de libros y autoras, escritores ya fantasmas o jóvenes plumas recién publicadas por vez primera; aquí se privilegian los diversos y diferentes géneros de la Literatura, así como ofrecemos una digna selección de títulos de Historia y demás Ciencias Sociales”.

Aún así, Treviño mantiene muy cerca su relación con México –trabaja junto a uno de los autores más conocidos del país–, pero también con Saltillo. Especialmente a través de sus escritos, pues mantiene una columna en el medio El Diario de Madrid en el que constantemente habla de su vida cotidiana en España, pero también sobre la vida que dejó en la capital coahuilense.