París, Francia.-  Hay alguien atrás de Ana Paula Vázquez y Ángela Ruiz que pocos conocen. Es quizá el “culpable” de que México hoy tenga una medalla olímpica en tiro con arco, pero que, para su desgracia, no se le recompensa su trabajo como se debe.

Eduardo Magaña, quien desde hace años es el entrenador, preparador y guía de los arqueros en Coahuila, es el responsable del 66% de la medalla de bronce que ganó México en París 2024.

Desde hace 10 años entrena a la ramosraizpense Ana Paula Vázquez y desde hace ocho a la saltillense Ángela Ruíz en Coahuila, pero para los directivos mexicanos eso no es suficiente para integrarlo al equipo nacional.

Por eso, ante el nervio, salió a caminar para aplacar los latidos del corazón. No fue capaz de ver cómo dos de sus alumnas conseguían la medalla de bronce en tiro con arco femenil. Él es el autor desconocido, el cerebro de una medalla que jamás había conseguido México.

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No las quise ver (la última ronda), es la emoción que no quieres ver si va a salir bien o mal, no está en mis manos estar ahí. Me salí a caminar, cuando regreso me dice mi esposa que sí ganaron y me comenzaron a llegar mensajes. Es la emoción que vives como parte del equipo, el resultado de que estén felices tus alumnas; estaba nervioso, me fui a caminar, me distraje, en lo que terminaba”, confesó el entrenador Eduardo Magaña a ESPN en una videollamada.

Apenas terminó la competencia y el teléfono de Eduardo Magaña comenzó a sonar, era una llamada de agradecimiento. Del otro lado, desde París, Francia, marcaba Ángela Ruíz, con la que trabajó ocho años hasta llevarla a unos Juegos Olímpicos, a su lado, en el podio de ganadoras estaba Ana Paula Vázquez, la arquera que conoció desde los 14 años y ha preparado por una década.

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Hace rato me marcó Ángela, les decía que hoy disfruten, feliz cumpleaños, disfruten. Estás viviendo un sueño. Al rato te vas a ir a descansar y mañana comienza de nuevo todo. ¡Qué bueno que ganaste! Mañana continúa la competencia y hay que ser mesurado, no todo es pura alegría o pura energía negativa. Es momento de festejar, pero mañana a trabajar de nuevo y competir”.

¿Tendrá premio?

Eduardo Magaña fue atleta olímpico en Atenas 2004. Después del retiro se fue al anonimato para preparar a la generación que llevaría al podio a México. Primero fue Ana Paula Vázquez, que la arrancó del tochito bandera para enseñarle a lanzar flechas con precisión, y después a Ángela Ruíz, la chica que festejó su cumpleaños número 18 ganando la medalla de bronce en Paris 2024.

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Lo primero que pienso es que me da gusto que estén creciendo, me da gusto el trabajo que están haciendo y que continúen, es algo que me caracteriza. Las voy a felicitar, pero les voy a decir que trabajen, que hay que continuar, que hay que seguir, no se agachen, no bajen la mirada, continúen”, comentó Magaña.

La posición que hoy tiene Magaña, de 40 años, antes la tuvo Miguel Ángel Flores, el entrenador que viajó a París y estuvo a lado de las medallistas de bronce en las finales.

En Londres 2012 Miguel sólo entrenaba a una arquera, Alejandra Valencia, y el responsable nacional era el coreano Lee Wong. Miguel no aparecía en la línea de tiro, pero sí viajó a esos juegos, estuvo cerca de su deportista y vio cómo era el entorno. Ahora la puerta está cerrada para incluir al responsable de dos de las tres seleccionadas de tiro con arco.

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Son temas de organización y tomar decisiones, mi labor es desarrollar esos arqueros. Aquí se hacen los talentos, cuando llegan a selección nacional se van al CNAR, esa es la situación. Se respeta el puesto de cada uno”, admite.

De acuerdo al tabulador de premios, los entrenadores de cada disciplina que gane medalla en los Juegos Olímpicos 2024 ganaran un premio de 450 mil pesos en el caso del oro, 320 mil para la plata y 200 mil para el bronce, aunque Eduardo Magaña no sabe si recibirá alguna compensación por su trabajo de la última década, porque oficialmente su trabajo lo capitaliza alguien más.