Saltillo, Coah.-  La buena noticia es que más jóvenes desean estudiar una licenciatura, la mala, es que las opciones son limitadas y costosas. 

La alta demanda para ingresar a la Universidad Autónoma de Coahuila hace que los aspirantes busquen otras opciones en instituciones privadas o, incluso, fuera del estado. 

Y una de las alternativas más evidentes debido a la cercanía es Nuevo León: ese vecino nuestro que tiende a vernos con desdén, así como las grandes metrópolis ven a los provincianos. 

Fuera del nido

De los 21 mil 263 aspirantes a la máxima casa de estudios, en la primera vuelta quedaron fuera 11 mil 201 jóvenes, pero muchos de ellos, los más precavidos, también habían sacado ficha en la Universidad Autónoma de Nuevo León. 

De esta manera, alrededor de 200 coahuilenses que pagaron 800 pesos de la ficha (44 pesos menos que en la UAdeC) fueron aceptados en “la Uni”, y están a punto de dejar el nido para migrar a tierras regias. 

Es difícil tomar la decisión: alejarse de la familia, los amigos, la relación amorosa, el terruño; pero la posibilidad de acceder a un mejor futuro compensa las pérdidas. 

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Nos enseñan que el mundo es nuestro, pero nos da mucho miedo salir a explorarlo”, reconoce Natalia Ramos, saltillense de 17 años a punto de empezar Ingeniería Mecatrónica en la UANL. 

Un panorama inmenso

Y es que el panorama se vuelve inmenso al llegar a Ciudad Universitaria en San Nicolás de los Garza, pues entre el estadio de los Tigres y la imponente Rectoría, estudian alrededor de 117 mil 590 alumnos en alguna de las 125 carreras que ahí se ofertan. 

En las 90 carreras que oferta la UAdeC, hay alrededor de 30 mil estudiantes en todo el estado. 

En CU están las facultades de Ciencias Biológicas, Ciencias Químicas, Ciencias Físico Matemáticas, Ingeniería Civil, Ingeniería Mecánica y Eléctrica, Arquitectura, Derecho y Criminología, Filosofía y Letras, Contaduría Pública y Administración, Trabajo Social y Desarrollo Humano, y la Facultad de Organización Deportiva. 

Es como un Campus Arteaga a la “n” potencia. 

Hacer cuentas

Pero ese nuevo mundo sale caro pues, de entrada, la Uni impone una “cuota foránea” de 11 mil 470 pesos a los jóvenes que vienen de preparatorias de otro estado; más mil 900 del curso obligatorio de inglés; 3 mil 100 de material didáctico; 2 mil 570 del curso propedéutico, y 6 mil 405 pesos de la cuota del primer ingreso. 

En total, el primer semestre en la UANL le cuesta a los foráneos 25 mil 445 pesos, sin contar, por supuesto, las comidas, el transporte, y la renta de casa, departamento o asistencia estudiantil. 

La colonia más cercana a Ciudad Universitaria es la Anáhuac, de donde el estudiante se puede ir caminando sin necesidad de tomar metro o camión, pero la alta demanda dificulta la posibilidad de encontrar un cuarto disponible. 

Parecida a la colonia República de Saltillo, la Anáhuac tiene casas grandes y bonitas que fueron adaptadas para ofrecer asistencias a estudiantes, y el costo por un cuarto compartido va de los 3 mil 500 hasta los 5 mil pesos, que incluyen todos los servicios, pero no comidas. 

Los precios aumentan por un cuarto solo, y más si tiene un baño privado; y la renta de una casa con tres habitaciones oscila entre los 18 mil y los 20 mil pesos, más servicios. 

Las opciones se amplían en colonias más alejadas, pero se incrementa el costo del transporte que va de los 10 hasta los 17 pesos, pues varía si la ruta es suburbana y si tiene clima. 

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Sí sale caro, y los horarios de la escuela y lo difícil de la carrera hacen imposible conseguir un trabajo de medio tiempo”, reconoce Natalia Ramos, “yo no podría estar aquí si no fuera por mis papás”. 

Cobertura

En México, la cobertura de educación superior es de 32%, es decir, sólo 2 de cada 10 jóvenes pueden acceder a la Universidad. 

 Solamente 8 de cada 100 estudiantes que ingresan a la licenciatura logran terminarla.