Monclova, Coah.- Una familia inmigrante de Honduras busca una nueva oportunidad para salir adelante dentro de México.

Tras viajar durante un mes y quince días, los hondureños llegaron ayer a Monclova, provenientes de Monterrey.

La falta de trabajo en su país de origen los obligó a vender paletas en los bulevares de algunas zonas de la ciudad.

“ “En Honduras trabajamos todo el día por 10 lempiras, que son cinco o diez pesos”,

comentó Mayra, la madre de familia, que actualmente se encuentra sola con sus dos hijos de cinco y ocho años, debido a que su esposo fue deportado por migración al momento de realizar una entrevista para diversos medios en Monterrey, motivo por el cual protegió su rostro y el de sus hijos.

La familia ha corrido el riesgo de subir a los trenes para poder trasladarse de un país a otro. “Con el paso de los trenes, unos sí nos dan la oportunidad, pero en otros no. Ahorita nos están bajando a todos”, agregó Mayra.

Dentro de lo negativo, comentó que en Monterrey le ofrecieron apoyo para que sus hijos puedan estudiar,

“ “Ahorita ando viendo si me voy para Texas porque en Monterrey me dieron la oportunidad para que ellos estudien, el gobierno de aquí no me dejó, dijo que para los inmigrantes no había oportunidad de estudiar y me regresé a Monterrey, gracias a Dios en Monterrey sí me dieron la oportunidad para que ellos estudien”,

concluyó.