Reclamo y fuerte seguramente hará el padre Pepe Valdés, porque todo hace indicar que el suelo no es parejo entre las gentes de Migración, Salud y Enlace para ver a quién sí y a quién no les dejan tener su negocios, digo, su albergue, para apoyar a los migrantes.

Bueno el asunto está así: A la Diócesis de Piedras Negras le han prohibido y ésta ha aceptado de buena fe, que concentre migrantes en su albergue, lo mismo el que estaba en la avenida Anáhuac y que ahora opera allá a 50 metros del río Bravo, por cuestiones de salud.

Les dejan entregar comida, ropa y otros trámites, pero no que los migrantes pernocten en ese lugar, ahí sí no hay permiso desde hace más de dos años.

Lo mismo le sucede a una iglesia metodista de la calle Morelos y Matamoros que les proporciona alimentos, pero no que se queden a dormir ahí.

También eso enfrenta el Ejército de Salvación, otra ONG que le hace la chamba al Gobierno Federal al atender a cientos de migrantes por día con alimentos y ropa, incluso trámites, pero que lamentablemente no le permiten que pernocten en sus instalaciones.

Lo que no se explican los encargados de todos estos albergues es cómo al hotel Santa Rosa sobre la calle Guerrero y Morelos y a otro inmueble casona abandonada sobre la calle Morelos en el número 105 si le permiten tener unos 400 migrantes todos los días a los cuales les cobran el día a 400 pesos.

¿O van a decir que ahí sí son hoteles y que por eso se les deja que concentren los migrantes? Por eso es que el padre Pepe Valdés ve de reojo ese manejo que el INM y los de Enlace Municipal, del exbombero Juanito Ribera, los dejan hacer como si nada pasara.

Porque al Hotel Santa Rosa sí le dejan hacinar hasta 10 o más personas por habitación sin ningún control sanitario, es más, ni Salud los inspecciona, pero a Frontera Digna y al Ejército de Salvación sí los traen cortitos?

Lo que no es parejo es chipotudo, mas parece que esos dos lugares son operados por polleros y que alguien los protege o que se hace al menos de la vista gorda.

Claro, hasta que suceda una tragedia, un brote de Covid o una situación más grave para entonces sí echarse la papa caliente y culpar a terceros.

Ni qué decir de lo que concentran en ranchos y propiedades a orilla del río Bravo, donde nadie ve a pesar de que la Patrulla Fronteriza les reporta.

Seguramente grupos de 700 o hasta mil migrantes reunidos para cruzar el Bravo son imperceptibles.

Pero como el delegado del INM está incapacitado, por una cirugía, no piensen mal del contraalmirante Ramón Galindo, los que están en Piedras Negras hacen y deshacen sin reportar nada a Saltillo.

El daño de la 4T

Minosa se declaró en concurso mercantil, es decir, suspensión de pagos a terceros sin que esto implique responsabilidades de garantía, todo esto derivado de la cacería que emprendió el gobierno de AMLO vía Manuel Bartlett contra AHMSA y Alonso Ancira, al cancelar de la noche a la mañana sin aviso previo los contratos para surtir carbón a las plantas José López Portillo enclavadas en el municipio de Nava, dejando un despido de más de 4 mil empleados y generando una serie de problemas económicos a las regiones Carbonífera y Norte del estado de Coahuila.

Ahora habrá que ver qué opina el Presidente de la República, seguramente saldrá en sus mañaneras a culpar a los conservadores, fifís y la derecha de lo que está sucediendo, porque lo bueno de él son las excusas.

¿Qué dirán esas 4 mil familias que se quedaron sin sustento o que debieron emigrar a otras regiones o subemplearse ante el cierre de Micare primero y ahora su controladora Minosa que se declara en suspensión de pagos?.

El embate de la 4T con los cortes de energía eléctrica en pleno diciembre cuando AHMSA debería pagar aguinaldos, sueldos y ahorros fue otro golpe tremendo de la 4T y Manuel Bartlett y por ello es que se orilló a que otras empresas filiales del grupo entraran a este concurso mercantil que no es más que la suspensión de pagos a proveedores.

¿Pero y los ahorros de los trabajadores? ¿Como para cuándo los pagarán Ancira y AHMSA?.